Se nombran nuevos miembros de la Comisión Constitucional portuguesa.

Se conocen ya tres de las personalidades que serán nombradas para formar parte de la «Comisión Constitucional» que funciona bajo la dependencia del Consejo de la Revolución. El organismo está presidido por el comandante Melo Antunes, y sus funciones serán las de «dar su parecer sobre la constitucionalidad de las leyes que aprecie el Consejo de la Revolución», «juzgar las cuestiones de la inconstitucionalidad de las leyes», y «revelar la violación de su constitucionalidad por omisión ».No obstante, el papel de la Comisión será en la práctica bastante más amplio, no sólo por ser el comandante Melo Antunes su presidente sino también «por la influencia que los informes de esta comisión pueden tener sobre las decisiones del Consejo de la Revolución».

El general Eanes ha dado ya a conocer a su elegido: se trata del señor Mota Pinto, que fue líder del Partido Popular Democrático en la Asamblea Constituyente. Mota Pinto se separó del partido de Sá Carneiro como consecuencia del Congreso partidario de Aveiro. En la actualidad mantiene una posición política independiente que puede ser calificada de «socialdemócrata de izquierdas». Decididamente, Eanes, ha vuelto otra vez a dar pruebas de su inteligencia, eligiendo un hombre situado entre el PPD y los socialistas, que, además, no es visto con malos ojos por los comunistas.

La asamblea eligió hace unos días a la profesora Isabel Magalhaes Colaco, cuya competencia en materia jurídica es unánimemente reconocida.

El Consejo de la Revolución, por medio de Melo Antunes, ha elegido a dos juristas, uno del «grupo de intervención socialista» y otro del Partido Popular Democrático. El señor Luis Nunes de Almeida, es miembro del GIS, movimiento situado políticamente entre socialistas y comunistas, y el profesor Jorge Miranda es diputado del PPD, y, además, uno de los expertos portugueses en derecho constitucional.

Spínola,de nuevo interrogado

Entretanto, Spínola fue interrogado una vez más por las autoridades militares acerca de su presunta participación en el intento de golpe de Estado del 11 de marzo y también sobre las actividades del «Movimiento Democrático de Liberación de Portugal». Como ya informamos, jurídicamente, la situación de Spínola es de «libertad plena» y su única obligación consiste en «presentarse a las autoridades militares cuando éstas lo ordenan».