Aún no está descartado el Clay-Stevenson

La pelea entre Cassius Clay y el cubano Teófilo Stevenson, medalla de oro en los pesos pesados en los dos últimos Juegos Olímpicos, es una empresa que puede salir adelante. El combate supondría un seguro éxito económico, y hay promotores empeñados en conseguirlo. Stevenson no desea pasar al campo profesional, pero ha manifestado que estaría dispuesto a pelear con Clay y regalar su bolsa al COI.

El cubano Teófilo Stevenson es, con mucho, el mejor peso pesado amateur del mundo. Sus dos medallas de oro olímpicas consecutivas le acreditan como tal. Tras su nuevo triunfo en Montreal le llovieron muchas ofertas para pasarse al campo profesional, pero las desechó: «Si fuera profesional dejaría de ser un atleta, y para mí es. un orgullo serlo». Los hombres que le precedieron en la medalla de oro olímpica, George Foreman y Joe Frazier, no dudaron en pasarse inmediatamente al campo profesional, como lo hiciera el propio Clay, medalla de oro de los semipesados cuatro años antes de que Frazier consiguiera la de los pesados. Stevenson, sin embargo, quiere romper la racha y no parece dispuesto a emprender la empresa de marchar en pos del título del mundo profesional. Cuba no admite el deporte como profesión, y Stevenson no parece decidido a marcharse de allí. En todas sus declaraciones ha manifestado ser un entusiasta de Fidel Castro y del sistema cubano.Sin embargo, el hombre no es cobarde y ha manifestado que en determinadas condiciones estaría dispuesto a enfrentarse a Clay. Para conseguir que esta pelea se celebre hay un promotor que ha ofrecido 140 millones de pesetas a Stevenson y 840 a Clay. Stevenson piensa solicitar permiso del COI para celebrar el combate y, caso de que le fuera permitido, entregaría la bolsa íntegra a este organismo. En cuanto a Clay, no se manifiesta en contra de este combate, si bien duda mucho de que pueda celebrarse. En sus manifestaciones no se ha recatado en decir que encuentra muy peligrosa la pelea para el amateur cubano: «Nunca ha hecho más de tres asaltos. Me cuesta trabajo imaginármelo luchando, contra la fatiga en un sexto o séptimo asalto». A Clay tampoco parece preocuparle mucho la pegada de Stevenson: «Ha tirado a mucha gente, pero todos aficionados; un aficionado nunca es como Frazier, como Norton, como Foreman o como yo. Francamente, pienso que hay mucha gente que ignora la diferencia que hay entre un profesional y un amateur». En general, cada vez que ha sido preguntado, Clay se ha manifestado escéptico ante la posibilidad de que el combate se lleve a cabo, si bien siempre aseguró estar dispuesto a ello. A Clay le quedan ya muy pocas peleas y le interesan las buenas bolsas.

Mientras, el genial campeón se halla concentrado a la espera de su mucho más seria pelea con Ken Norton, que se ha decelebrar el próximo día 28 de septiembre con el título del mundo en juego. Norton es uno de los dos únicos vencedores de Clay y el hombre que más daño le hizo: le rompió la mandíbula. El vencedor de la pelea se enfrentará con el título en juego con el tercer grande: George Foreman.

¿Se producirá el combate Clay-Stevenson? Hace falta que coincidan tres circunstancias: que a Clay le quede un hueco en su programa de defensas, que Fídel Castro autorice a Stevenson y que el propio COI se avenga a permitir al cubano el enfrentamiento con el campeón mundial. La primera condición es fácil que se cumpla, porque los 840 millones tentarán a Clay lo bastante como para buscar ese hueco en sus fechas; la segunda, más difícil: Castro sólo autorizaría el combate si estuviera seguro de que su gloria nacional saldría victoriosa, y hace falta que sea muy optimista para que crea en esta posibilidad; en cuanto a la tercera, las decisiones del COI son imprevisibles y no cabe, anticipar nada. En definitiva, el combate se presenta, cuando menos, como probable.

La velada del Gas

Esta noche habrá boxeo en el Campo del Gas. El combate de fondo, según se anunció ayer, lo protagonizarán dos tremendos pegadores: Mimmoun Mohatar, dos veces vencedor de Pacheco, y el asturiano Fernando Pérez. Dentro del programa de la misma velada se incluye el combate entre Emilio Barcala y el catalán Pinto.