El nuevo presidente portugués, por la adaptación del Pacto Ibérico

Los actuales tratados entre España y Portugal deberán ser revisados unos y actualizados otros, declaró ayer en Lisboa el general Ramalho Eanes, presidente electo de la República. El general precisó que hablaba a título personal, ya que sólo era presidente electo y aún no se había formado el Gobierno con el que conjuntaente decidirá las cuestiones de política exterior.

Eanes se manifestó partidario de ampliar y modernizar toda clase de relaciones con España, pero afirmó que tanto un país como otro, teniendo en cuenta que están interesados en la integración en Europa, es en este contexto donde eberán estudiar sus relaciones esnciales en el futuro.El nuevo presidente de Portugal es un general de 41 años, veterano de las guerras coloniales, casado y con un hijo. Antonio Ramalho Eanes consiguió el 61,54 por 100 de los votos emitidos el domingo pasado, es decir, casi tres millones de ciudadanos de los seis millones censados consideran que el general es la garantía de paz yestabilidad para este Portugal en «revoluçao».

Quizá no se equivoquen. Eanes fue claro y tajante en sus primeras declaraciones como presidente electo. Dijo que no permitiría los «poderes paralelos», que combatiría la violencia y el separatismo y que intentaría que en Portugal la ley fuese igual para todos.

Eanes confirmó que encargará al líder socialista Mario Soares la formación del Gobierno y éste, a su vez, dijo que hará un Gobierno monocolor, con socialistas tan sólo. Ahí pueden comenzar las dificultades, porque el líder del Partido Popular Democrático, Sa Carneiro (su partido consiguió una victoria espectacular en Madeira y Azores), pidió ayer un Gobierno de concentración y de reestructuración nacional.

Por ahora Portugal sigue inmerso en un clima postelectoral. Se evalúan los porcentajes de los candidatos perdedores. Y se sacan algunas conclusiones. Por ejemplo, el 16,52 por 100 del comandante Otelo Saraiva de Carvalho les parece a muchos un espectacular triunfo. Y el 7,58 por 100 del comunista Octavio Pato se considera por casi todos una tremenda derrota. Los votos del ex primer ministro, Pinheiro de Azevedo -que sigue internado en un hospital, donde se recupera de un ataque cardíaco-, son para casi todos la consecuencia normal de su enfermedad y de su limitada popularidad.

Eanes comentaba ayer que los votos alcanzados por el pintoresco Otelo Saraiva de Carvalho podrían traerle en el futuro algunas complicaciones, «porque se trata de un factor de inestabilidad», dado el apoyo que a su candidatura prestó la izquierda revolucionaria. De todos modos, el futuro en Portugal no será fácil...

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