La lluvia deslució la primera jornada de los campeonatos de España

Mal empezaron los Campeonatos de España absolutos de atletismo. Si primero el fuerte viento impidió la homologación de los 10'2 que realizaron Heras y Sánchez Paraíso en las series de 100 metros, luego fue la lluvia quien hizo suspender el programado la primera jornada. Sólo dio tiempo a que dos campeones subieran al podium, Ana María Molina en disco y Juan Briceño en peso. La primera jornada no dio más de sí.La clasificación final de disco femenino fue la siguiente: 1, Ana María Molina, 40'64; 2, Encarnación Gambús, 40'02; 3, Carmen Calahorro, 37'66. Las dos primeras lograron su mejor lanzamiento en el primer intento. El tiempo dejó después de ayudarlas. En peso masculino, tras Briceño, que hizo un estupendo lanzamiento, precisamente en su último intento, de 16'58, se clasificaron Herrerías, con 15'56, y José Yañez, 15'24. Los demás rivales quedaron considerablemente distanciados.

En la jornada de ayer por la mañana, las finales que se suspendieron en la jornada del domingo tuvieron como campeones a Ruiz Bernal en 5.000 metros, 14-09-4; en 1.500 femeninos, a Carmen Valero con 4-35-4, y en jabalina, a Juliani, 73,74.

La final de los 100 metros fue lo mejor que llevamos visto hasta ahora en los campeonatos. Por algo estaban en la línea de salida cinco recordinans nacionales: Martínez, Sánchez Paraíso, Sarría, Eras y García López. Valferrer era el sexto finalista. Tres décimas de segundo separaron en el apretado final a Martinez, campeón, con un tiempo de 10-3 del último, Valferrer, que hizo 10-6.

La clasificación final fue: 1, Martínez,. 10'3"; 2, Sánchez Paraíso, 10'3; 3, Sarría, 10'4; 4, Eras, 10'4; 5, García López, 10'5; Valferrer, 10'6.

En los 100 metros femeninos ganó Ela Cifuentes. Los 12 segundos que hizo fueron mejores que los 12-1 de Yolanda Oroz y los 12-2 de Pilar Fanlo, segunda y tercera respectivamente. La madrileña demostró su buen momento y ganó bien.

En la final de martillo, Alcántara logró el primer récord de los campeonatos. Su lanzamiento de 66,44 a sólo 44 centímetros del récord nacional, le valió el título de campeón y fue el fiel exponente de que vuelve por sus fueros tras la sanción que sufriera. Los inmediatos clasificados fueron Fiblá, 66,70 y Cortezón, 63,80.

Ana María Molina repitió título de campeona tras ganar el domingo la final de disco. También subió al podium en primer lugar en la prueba de peso con 13,93. Encarnación Gambus, que también fue subcampeona en disco, fue segunda en peso con 13,59 por delante de Carolina Nolten, 11,83.

La prueba de altura resultó maratoniana. Carrasco y Cabrejas quedaron empatados con 2,10 y mientras el último rehusó a saltar en el desempate, Carrasco hizo una larguísima serie de intentos nulos para proclamarse campeón finalmente sobre 2 metros. Los dos habían hecho saltos válidos en la serie final sobre 2,10.

Jornada de noche

La jornada de noche, organizada para que el calor no afectara a los atletas, no ayudó a mejorar el nivel de los campeonatos. Fueron seis las finales disputadas y éstos sus ganadores: 20 kms. marcha: Llopart, 1-39-29-8. 3.000 ms. obstáculos: Ortega, 8-41.0. Longitud: Blanquer, 7,75. Y en las finales femeninas, en altura, Isabel Mozún, con 1,69; en 3.000 ms., Carmen Válero, 9-51-6; en 400 ms. lisos, Rosa Colorado, 55-6.