Hoy votan los argelinos su Carta Nacional
«El socialismo en Argelia es un movimiento irreversible». Así lo subraya el proyecto de Carta Nacional que se somete hoy a referéndum popular, y que paradójicamente, no despierta el interés del desenlace: un sí masivo está ya asegurado.
"Toda revolución entraña una acción», manifiestan las pancartas de la propaganda. Pero ni en Argel, ni en Orán, ni en las aldeas socialistas, ni en las industrias, encontré un solo reaccionario. La acción por la derecha y la contestación por la izquierda- tuvieron lugar antes, a lo largo de la campaña explicación y discusión por todo territorio de un país cinco veces más grande que España, y con una población que apenas alcanza la mitad que la nuestra. Después de dos meses de duras críticas al sistema y de sus gestiones a todos los niveles, el resultado para los argelinos es que se van a pronunciar sobre un proyecto, que consagra los ideales de la revolución socialista, elaborado por ellos mismos.
Hacer hablar al pueblo
«Vuestro papel no consiste en hablar, sino en escuchar y hacer hablar al Pueblo». Con estas palabras del presidente Bumedian a los responsables de organizar la campaña de explicaciones, se alteraba a la concepción clásica de un referéndum desde arriba, convocado por el poder que controla al mismo tiempo los medios de propaganda.En Argel las banderas nacionales casi se confunden con la ropa tendida, y los pasquines del Frente de Liberación Nacional (FLN) tan sólo cubren algunos metros cuadrados de los muros blancos de la capital. Carteles de dos en dos en francés y en árabe, que invitan al sí: Oui y nam. Pero la ciudad sigue siendo Argel, la blanca, como la denominan orgullosos sus habitantes. Una discreta, propaganda por partida doble como reflejo de la dualidad que caracteriza la capital de la antigua colonia francesa. Una propaganda al cuadrado que se intensifica a medida que penetra en los pueblos y pierde su carácter francófono para ganar en arabización.
El proyecto de Carta Nacional quiere ser en el plano interior la consolidación de la independencia de Argelia, y en el plano internacional busca la definición de un socialismo del Tercer Mundo, sin dejar de lado el papel de Argelia en el grupo de países no alineados.
En las vísperas del escurtinio, los argelinos tienen la sensación de que un gran paso fue dado, y sienten el triunfo en el bolsillo. El. Moudjahid, diario nacional del partido único en su edición del viernes, hablaba ya «del proyecto de Carta Nacional que será aprobado el domingo próximo por el pueblo de Argelia». Un referéndum del Tercer Mundo. Un referéndum a la argelina.
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