Las elecciones políticas impiden el fichaje más caro de Italia
Las elecciones políticas italianas han bloqueado lo que podría ser el traspaso más sensacional de los últimos tiempos del fútbol italiano. La Juventus estaba dispuesta a desembolsar 2.500 millones de liras (197 millones de pesetas) por el fichaje de Beppe Savoldi, delantero centro del Napoli.
El motivo de que las negociaciones hayan llegado a un punto muerto entre los dos clubs es eminentemente político. La Juventus tiene como propietarios a los hermanos Gianni y Umberto Agnelli. Este último es candidato a las elecciones por las listas democristianas, por lo que se ha considerado que el hecho de adquirir a un jugador por tan elevada suma de dinero podría repercutir negativamente en el ánimo de los electores cuando el país pasa por momentos de aguda crisis económica.
Por otra parte, los líderes democristianos habrían recomendado a Umberto Agnelli no anunciar el traspaso. Los «tiffossi» del Napoli -conocidos como los más fogosos y apasionados de Italia- podrían recibir mal la noticia y sentirse traicionados por la «sustracción» de su ídolo. Ello, en definitiva, podría repercutir en las urnas contra las candidaturas de la Democracia Cristiana.
No resulta éste el Único elemento en que política y fútbol aparecen vinculados. Un candidato democristiano a la Cámara de Diputados de Roma, Mauro Bubbico, ha utilizado como publicidad un folleto con el escudo, los colores y el nombre del club Lazio, que ha sido enviado a todos los hinchas romanos del equipo. En el club se dice ignorar el asunto, pero el aspirante a diputado parece contar con el fervor de la afición para tener un puesto en la Cámara.
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