El crédito exterior oscilará, entre 500 y mil millones de dólares

Las cifras barajadas por la prensa española sobre el crédito que Villar Mir, ministro de Hacienda, va a negociar con la gran banca norteamericana son «muy exageradas", según calificó el propio vicepresidente del Gobierno para asuntos económicos a su llegada a Nueva York.«Concretamente -dijo- de fórma tajante, no los necesitamos». En todo caso, la cifra oscilará entre los 500 y 1.000 millones de dólares.

Juan Miguel Villar Mir se refirió a los motivos de su visita de la que señaló tiene como fundamental propósito una revisión general de las relaciones económicas y financieras, con Estados Unidos, ya que según apuntó,«estamos en un momento importante en el que los Estados Unidos están evidentemente dispuestos a mejorar sus relaciones económicas con España tras la magnífica impresión dejada por la visita de Sus Majestadés».

A lo largo de los tres días que durará la estancia del ministro de Hacienda español en la capital federal se entrevistará con los secretarios del Estado y del Tesoro, Henry Kissinger y Bill Simon, altos cargos de la Administración norteamericana y ejecutiva de diversas instituciones financieras internacionales,

En Nueva York, Juan Miguel Villar Mir mantendrá conversaciones con altos ejecutivos de la banca, que, a la postre, son los que van a conceder el importante préstamo a España, banca de la que el ministro español ha podido apreciar un mayor interés y una actitud más positiva para dar auténtico respaldo financiero a las actividades españolas. El viaje de Villar Mir a Estados Unidos, ha sido motivo de interés y a la vez de preocupación entre las altas esferas privadas económicas y financieras del país, al considerar éstas que por primera un vez un ministro español sale al extranjero para pedir un préstamo internacional, máxime cuando este tipo de operaciones internaciones se han llevado siempre con el máximo sigilo.

Por otro lado, fuentes consultadas por EL PAIS, ponen de relieve que esta operación con la gran banca internacional no deja de ser más que un cambio de intereses que supondrá, a plazo medio, la instalación en nuestro país de las principales entidades bancarias norteamericanas.