Revivir los temores hacia el Este fue objetivo principal

Subrayando en el comunicado final una seria preocupación por el crecimiento del potencial militar del Pacto de Varsovia, el Comité de Planes de Defensa de la Alianza Atlántica concluyó ayer la sesión iniciada el jueves.Tres temas concentraron la atención de los ministros: asuntos económicos y militares de la OTAN, la grave situación en el Mediterráneo y las relaciones Este-Oeste.

Respecto al primer punto, el Comité aprobó los planes económicos de las fuerzas de la OTAN para el período 1977-1982, destacando que la utilización óptima de los recursos disponibles constituyen una necesidad vital para los esfuerzos colectivos de defensa.

El comunicado final subraya, los progresos obtenidos en el sector loigístico y la importancia de la racionalización de armamentos.

«Los ministros -prosigue el texto- se han felicitado de los logros obtenidos en cuando a standardización e interoperabilidad de los equipos militares y han encargado a los servicios correspondientes que continúen los trabajos para solucionar los problemas más difíciles.»

En lo que se refiere al sistema AEW (Detección Lejana de Aviones), los titulares de Defensa de la Alianza Atlántica han vuelto a reiterar que su puesta en marcha es urgente y necesaria, pero no han decidido todavía su adquisición.

Como siempre, el Comité se detuvo en el análisis de las graves tensiones que subsisten en el Mediterráneo y, aunque el comunica do no da cuenta del contenido de las discusiones, sí deja, entrever la posibilidad de que la Alianza Atlántica refuerce en el futuro sus efectivos en una zona tan vital para su seguridad.

Los ministros han tomado acta con satisfacción del acuerdo concluido recientemente entre Estados Unidos y Turquía y el secretario de Defensa norteamericano, Donald Rumsfeld, expuso a sus colegas eI contenido del nuevo tratado hispano-norteamericano y destacó la contribución que España presta a la defensa occidental.

A la pregunta de un periodista para que ampliara lo expuesto ante el Comité, Rumsfeld se limitó a decir que también había informado de la alocución pronunciada por el Rey Juan Carlos en el Congreso de los Estados Unidos.

Fuentes diplomáticas aseguran que el secretario de Defensa no se refirió durante las sesiones de trabajo a tina eventual entrada de España en la OTAN, puesto que Rumsfeld es consciente de la resistencia de varios países europeos.

Quizá la parte más importante de los trabajos ha sido el análisis de las relaciones Este-Oeste. El comunicado final precisa a este respecto que el Comité de Planes de Defensa recogió con inquietud los informes sobre el crecimiento de potencial militar del Pacto de Varsovia, que rebasa, a su juicio, las necesidades defensivas.

Los titulares de Defensa de la Alianza Atlántica han mostrado su preocupación ante la posibilidad de que el bloque oriental utilice la fuerza de las armas, directa o indirectamente, en el mundo entero.

Esta machacona insistencia en la amenaza del Pacto de Varsovia, que para muchos observadores viene dictada por intereses políticos (concretamente por la intención de poner un freno al avance del eurocomunismo), ha sido inmediatamente contestada por los soviéticos.

«Pravda», órgano del Partido Comunista soviético, salió al quite ayer acusando a los occidentales de un «continuo aumento de su presupuesto militar», y les advierte de que «deben poner fin a una carrera de armamentos sumamente peligrosa para los intereses de la humanidad».

En definitiva, una reunión con pocos resultados espectaculares, y cuyo máximo objetivo parece haber sido el revivir los temores hacia la Europa oriental por motivos que no están claros.