«El asociado busca participar»
Vicente Llópiz González, vicepresidente de la Asociación de Vecinos del Barrio de la Concepción, cuarenta y nueve años, casado, tiene un hijo de doce años. Trabaja como vendedor en la sección comercial de Aceros Atlas y actúa como presidente en funciones durante la ausencia del titular, Arturo Vega.Pertenecí a la OJE y al Frente de Juventudes. Posteriormente evolucioné ideológicamente. Fui acusado y condenado a dieciséis años de cárcel por pertenecer al Comité de reconstitución de las Juventudes Comunistas y ser miembro de la Oposición Sindical Obrera. Cumplí seis años de cárcel en el penal de Burgos y aún estoy en libertad condicionada. Preparo un libro sobre los porqués de mi evolución ideológica.
-¿Por qué se insertó en una asociación de vecinos?
-Al salir de la cárcel no podía adscribirme a ningún partido político porque me privaban de la libertad condicional. En la Concepción existía una Asociación de Cabezas de Familia, patrocinada por Secretaría General del Movimiento. Murió por falta de aceptación popular y surgió la Asociación de Vecinos, que planteaba un espectro de participación democrática más amplio, y fui elegido vicepresidente.
Estudió bachillerato por el plan de 1938 y dos años en la Escuela Social. Le interesa sobre todo la historía y la economía, que ha estudiado por su cuenta.
-¿Qué busca la gente en una asociación de este tipo?
-Desde la participación en la búsqueda de, solucionar problemas, hasta beneficios propios de tipo económico (es el caso de los comerciantes que hacen descuento en las compras de los asociados). Sobre todo, tener acceso a actividades culturales comunes o disponer de un local de esparcimiento, por cincuenta pesetas al mes.
El 70 por 100 de los asociados pertenece a la clase media, a los que se unen más de 150 obreros.
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