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Livakovic: “Aprendí de Subasic”

El portero croata dice que imitó a su paisano en el Mundial de 2018

Los jugadores de Croacia abrazan a su portero Livakovic tras lograr la clasificación ante Japón.
Los jugadores de Croacia abrazan a su portero Livakovic tras lograr la clasificación ante Japón.Georgi Licovski (EFE)
Diego Torres

Lo decía Alfredo di Stéfano: “El fútbol entra por los ojos”. El juego más complicado que existe puede imitarse si se observa de cerca. Solo así se explica que los mismos fenómenos se reproduzcan en los mismos países. Le sucedió a Croacia, que este lunes en el estadio de Al Wakrah, alcanzó los cuartos de final del Mundial después de una tanda de penaltis en la que su portero paró tres lanzamientos de cuatro en el duelo con Japón. El héroe de la noche, el portero Dominik Livakovic, explicó brevemente una fórmula que parecía intransferible: “Aprendí de Subasic”.

Livakovic, de 27 años, fue el tercer portero de Croacia en el Mundial de Rusia. Testigo privilegiado de la hazaña de Danijel Subasic, su compañero titular, que en los octavos de final ante Dinamarca paró el primero (Eriksen), el cuarto (Schone) y el quinto (Jorgensen) disparo de la tanda antes de propiciar el pase a cuartos. La proeza solo tuvo un precedente en la historia de la Copa del Mundo, cuando el portugués Ricardo detuvo tres penaltis a Inglaterra en 2006.

En 2018, los cinco daneses mandaron el balón entre los tres palos. Lo mismo les sucedió a los japoneses Minamino, Mitoma y Yoshida en Qatar.

“Fue una batalla de penaltis y no pudimos ganarla”, dijo el seleccionador japonés, Hajime Moriyasu, cuando le preguntaron por la entereza de sus jugadores ante una situación tan angustiante. “Tenemos que aceptar este resultado. Pero no creo que hayamos sucumbido a la presión. Creo que el portero croata estuvo genial. Maravilloso, por más que nosotros en nuestro país debamos mejorar este aspecto del juego”.

Livakovic, que juega en el Dinamo de Zagreb, fue sepultado por todos sus compañeros después de que todos corrieran hacia él en manada, en el intento de abrazarlo, cuando acabó la tanda. “Es más instinto que entrenamiento y análisis”, dijo, cuando le preguntaron por su arte, resultado de un don que le ha llevado a parar 14 penaltis en su carrera. “No me parece que estos penaltis fuesen fáciles de defender. No fueron perfectos. Pero fueron duros, muy fuertes, salvo el primero, el de Minamino, que no fue tan violento. Gracias a Dios”.

El seleccionador croata, Zlatko Dalic, se rindió a su guardameta: “Hoy nos faltaban algunos de nuestros mejores lanzadores de penaltis. Pero Livakovic nos resolvió todos los problemas. Sabía que estábamos en buenas manos. En el entrenamiento de ayer [domingo] ensayamos penaltis y le vi hacer paradas increíbles. Hoy ha estado al nivel de Subasic”.

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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