Marc Márquez doma la Ducati y se mantiene invicto en el GP de las Américas
El líder del Mundial se lleva su tercera ‘pole’ y ‘sprint’ consecutiva después de mantener a raya el primer envite serio de Pecco Bagnaia en Austin


Marc Márquez lo ha vivido todo encima del asfalto, y sabe que apenas una milésima de segundo puede cambiar la historia de un campeonato. Por ello se fustigaba el viernes después de forzar más de la cuenta y sufrir su primera caída con la Ducati del equipo oficial en su querido jardín texano. “Pilotaba como si no hubiera agua y me llevé un toque de atención guapo”, dijo tras salir disparado por orejas e impactar violentamente contra el asfalto. La cosa quedó en susto y el ocho veces campeón del mundo quiso aplicar la lección este sábado, donde arrambló de nuevo con la ‘pole position’ y la victoria ‘sprint’ en el GP de las Américas, no sin domar antes su Desmosedici GP ante el primer envite serio de su compañero Pecco Bagnaia.
Aunque el dominio del 93 volvió a ser indiscutible al final de la jornada, una primera vuelta a corazón abierto en la prueba corta celebrada en Austin le dejó al borde del desastre en el cuerpo a cuerpo contra el tricampeón italiano y vecino de garaje. Una de sus salvadas de videojuego le permitió seguir y, como si nada, fue capaz de terminar la vuelta inaugural en primera plaza. En cinco curvas hubo cuatro adelantamientos entre Márquez y Bagnaia, y en total se vieron seis adelantamientos en cabeza en un solo giro, en una de las vueltas más memorables de los últimos tiempos.
Álex Márquez, de nuevo el segundo de los mortales al final del día con su Ducati satélite del Team Gresini, también se lo pasó en grande en la pelea y volvió a superar a Bagnaia en línea de meta. El podio de la ‘sprint’ ha sido calcado en las tres primeras carreras cortas del campeonato, pero en esta ocasión el piloto turinés pareció por fin despertar de su letargo. Una salida fulgurante le permitió pasar de la sexta a la primera plaza en la curva uno, y luego demostró agallas en el duelo con el líder del certamen. Aunque terminó por no batir a los hermanos de Cervera, con eso le bastó para recuperar una sonrisa que había perdido en Tailandia y Argentina.
Asentado de nuevo en cabeza, a partir de la segunda vuelta Marc Márquez desplegó su demoledor ritmo para escapar de sus perseguidores y navegar a placer las nueve restantes. “El desastre ha estado muy cerca, ha ido de muy poco”, reconocía el ganador en el podio. “Ha sido una bonita pelea con Pecco y Álex en la primera vuelta, pero luego he podido destacarme y gestionar un poco la diferencia”, subrayó. Si bien el mayor de los Márquez Alentà ha encabezado 15 de las 22 sesiones oficiales disputadas en 2025, su dominio en Austin le exigió domar la Ducati desde los entrenos hasta la competencia.
“He cometido demasiados errores para ser la clasificatoria”, lamentaba a pesar de registrar su octava pole en el trazado estadounidense. Desde 2019, año de su octavo título, no encadenaba tres primeras plazas en parrilla de forma consecutiva. Para alegría de Julià y Roser, Álex volvió a redondear la jornada para la familia con una segunda plaza que le sabe a victoria. “Ser segundo aquí es como una victoria. Marc está en otro mundo en este circuito”, concluía el hermano, que cruzó la bandera de cuadros a ocho décimas. El guion de este domingo (21.00 horas, DAZN) se espera parecido, y es que Marc Márquez ha ganado en siete ocasiones en este circuito desde que desembarcó en la categoría reina en 2013. Precisamente en el GP de las Américas logró su primera victoria en MotoGP, y como quedó demostrado estos días, su único enemigo aquí es él mismo.
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