Mbappé revive al Real Madrid en La Catedral
El francés, con dos goles y una asistencia, lidera una contundente victoria contra el Athletic con la que el Real, intenso y con determinación, mantiene el pulso al Barça, que se había escapado cuatro puntos
El Real Madrid se presentó en San Mamés, uno de los escenarios futbolísticos más exigentes, acuciado por las dudas de su rumbo errático y por el estirón del Barcelona, que había solventado el día antes su difícil cita contra el Atlético y se había alejado cuatro puntos en la cabeza de la Liga. Sobre esa cornisa en la que parecía empezar a tiritar incluso Xabi Alonso, el Madrid despachó una estupenda función comprometida e intensa en La Catedral, cabalgando sobre el momento de inspiración extraordinaria de Mbappé (dos goles y una asistencia), las paradas de rutina imposible de Courtois y la puntería mortífera de los pases largos de Trent, que se retiró lesionado.
Así se mantuvo enganchado a la Liga y ganó unos días de paz para su técnico y para el crecimiento de un proyecto aún balbuceante, a solo una semana de la temible visita del City al Bernabéu.
En este contexto, el Real respondió con certezas de una solidez desacostumbrada, sin posponer la tarea en San Mamés. Lució otro aire desde el comienzo, con intensidad, determinación y más velocidad en la circulación de la pelota. Se tiró a por el encuentro como suele hacerlo el Athletic cuando recibe a los blancos, día grande en Bilbao. El equipo de Xabi tenía todos los interruptores hacia arriba, con más convicción que otras tardes, con menos dudas y rodeos insustanciales en el centro del campo. Por ahí se le solía apagar la luz y Tchouameni parecía remolonear en círculos, indeciso y sin inspiración. Esta vez no tenía la compañía de Güler, que empezó en el banquillo, sino la de Camavinga, muy atento al corte y mirando siempre hacia delante, sin enredos.
El pelotón de Xabi se presentó en La Catedral con una versión más directa que buscó exprimir desde el inicio la potencia nuclear al espacio de Mbappé y Vinicius, que van sintonizando la misma frecuencia. En ese contexto, el pie angelical de Trent constituye un atajo imbatible. El inglés abrió la caja de trucos y se largó a cruzar envíos teledirigidos desde la banda derecha a la espalda de la defensa del Athletic. Se saltaba así ese nudo que el Madrid se hace muchas veces a sí mismo por el centro y dejaba al equipo de Ernesto Valverde sin tiempo para recular y taponar las grietas.
Mbappé cazó uno de esos envíos como quien atrapa una mariposa flotante y se arrancó salvaje hacia Unai Simón, un estallido de potencia controlada. Con dos regates secos se plantó en la corona del área, soltó un derechazo y marcó. Al portero de la selección española, que acababa de ganarle un mano a mano al francés, no le alcanzó la estirada. La vía de las diagonales de Trent prometía tanto que se animó también Militão, que dejó a Vinicius solo ante Unai. El brasileño probó abajo, pero el portero alcanzó con el gancho.
El Athletic era un espectador en su casa, lugar donde siempre ejerce de protagonista, en particular cuando recibe al Madrid. Pero el equipo de Xabi castigaba más que nunca la espalda y apenas dejaba hilos sueltos. Aunque cuando aparecieron, los rojiblancos se agarraron a ellos y comenzaron a crecer. Se equivocó Fede Valverde en una salida y Guruzeta se encontró con la primera gran parada de Courtois. El Athletic se enganchó por fin al duelo y Berenguer se encontró mano a mano con el portero belga, que se desplegó en una cruz gigante y desactivó el intento.
Mientras Xabi sigue buscando que funcione el mecanismo, cuenta con dos tipos que viven un mundo aparte, en un nivel lejos del alcance general. Courtois, iluminado en su portería; Mbappé en la contraria. El francés asistió de cabeza a Camavinga para el 0-2 después de que Trent, otra vez el pie derecho del inglés, le encontrara a él en el segundo palo. Fue el final de una larga y brillante combinación coral.
El pasador y Camavinga, muy finos, no pudieron sin embargo terminar el partido. Trent se fue con molestias en el muslo izquierdo y el francés, con problemas en el tobillo de esa pierna, dos contratiempos preocupantes.
El que no se tuerce es Mbappé, que el año pasado sintió que tocaba fondo en San Mamés, donde ahora le salía todo. Probó desde 27 metros, algo escorado a la izquierda, y volvió a acertar con la red del Athletic. El Madrid tenía resuelto un compromiso con mucho más margen del previsto. Tanto, que Xabi dio minutos de golpe a Rodrygo, Brahim y Gonzalo, que entraron por Mbappé, Vinicius y Militão. Un respiro enorme en un escenario crudo para enterrar el desplome de noviembre.
| Clasificación | PT | PJ | PG | PE | PP |
|---|---|---|---|---|---|
6
ESP
|
24 | 14 | 7 | 3 | 4 |
7
GET
|
20 | 14 | 6 | 2 | 6 |
|
8
ATH
|
20 | 15 | 6 | 2 | 7 |
9
RAY
|
17 | 14 | 4 | 5 | 5 |
10
RSO
|
16 | 14 | 4 | 4 | 6 |
| Clasificación | PT | PJ | PG | PE | PP |
|---|---|---|---|---|---|
1
BCN
|
37 | 15 | 12 | 1 | 2 |
|
2
RMA
|
36 | 15 | 11 | 3 | 1 |
3
VLL
|
32 | 14 | 10 | 2 | 2 |
4
ATM
|
31 | 15 | 9 | 4 | 2 |
5
BET
|
24 | 14 | 6 | 6 | 2 |
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