La acusación de Manu Sarabia sobre Javier Clemente 38 años después: “Viví una situación abusiva, de acoso”
El cisma que se provocó en el Athletic en 1986, renace a raíz de la publicación de la biografía del futbolista en la que acusa de ‘mobbing’ al exseleccionador
Los últimos días del mes de enero de 1986, en Bilbao se produjo un terremoto deportivo y social que todavía produce réplicas de cuando en cuando. El Athletic se dividió en dos bandos, durante un tiempo irreconciliables: los partidarios de Javier Clemente, el entrenador que había llevado al equipo a ganar dos ligas, una Copa y una Supercopa, y los incondicionales de Manolo Sarabia, la magia hecha futbolista, partícipe y muchas veces protagonista de esos éxitos sobre el terreno de juego. Después de varios meses de tensión larvada, de amagos por ambas partes, de declaraciones explosivas, el entrenador anunció que nunca más volvería a alinear al futbolista y la directiva, presidida por Pedro Aurtenetxe, reaccionó destituyendo a Clemente.
Fue en vísperas de un partido en el Camp Nou, cuando después de una larga madrugada con reuniones de la directiva con los jugadores y de los futbolistas, salvo Sarabia, en el domicilio de Clemente, se soltó la bomba del despido. La prensa tomó partido. Algunas firmas ilustres apoyaron al jugador; otras al entrenador. Al día siguiente de conocerse la noticia, Clemente acudió a darse un baño de masas al pabellón de la Casilla, donde jugaba el Cajabilbao. El público le recibió puesto en pie, los periódicos bilbaínos sacaron suplementos sobre el caso. Para enmarañar más el asunto, el periodista del corazón Jesús Mariñas, comentó en el programa Protagonistas de la COPE, que dirigía Luis Del Olmo, que todo era consecuencia de un “lío de faldas”. Clemente se querelló contra ambos, que fueron condenados a pagarle dos millones de pesetas (12.000 euros).
La herida en Bilbao tardó en cicatrizar, de hecho, no está cerrada del todo. Clemente y Sarabia procuran evitarse. Cuando se reúnen anualmente los campeones de 1983 y 1984, ambos se alternan para no coincidir, aunque lo hicieron inevitablemente, en la celebración de la gabarra el pasado mes de abril, cuando el club les metió en el mismo barco, y en la celebración del 125 aniversario del Athletic en el que los veteranos, dirigidos por Clemente, jugaron un partido amistoso en el que Sarabia apareció en la alineación. “Parece mentira que esto siga así”, comenta un exjugador rojiblanco, amigo de ambos, que prefiere no dar su nombre. “Resulta que García y De la Morena, que se insultaron a diario durante años, se han reconciliado, y entre Manolo y Javi no hay ni el más mínimo acercamiento”.
En las décadas que han pasado, Clemente ha explicado decenas de veces su versión de los hechos y nunca encontró réplica en Manolo Sarabia, hasta que ha aparecido el libro, escrito a medias con su mujer, la periodista Begoña Armesto, y titulado Chaval, ¿quieres venir al Athletic? (ediciones Al Poste), que es la frase que le dijo Piru Gainza, leyenda del club, cuando decidió ficharle. En la publicación, que fue presentada el miércoles en San Mamés, con presencia multitudinaria de invitados, entre ellos excompañeros como Tato Abadía, Quique Setién, Andoni Goikoetxea, Ángel María Villar, Santi Urkiaga o Iribar, Sarabia expone por primera vez su versión de lo que sucedió. “Hubo un momento en el que dije: ‘hasta aquí he llegado’. Tengo que reivindicar mi figura. No puedo quedar para la historia del Athletic como una víctima”.
En el libro, Sarabia acusa a Clemente de mobbing. “Durante cuatro temporadas fui víctima de acoso laboral. Un conflicto que me colocó en el ojo del huracán, que unió mi nombre a la mayor crisis de la historia del club e hizo que la palabra ‘polémica’ se vinculara a mi carrera futbolística”, cuenta en el libro. “Viví una situación abusiva, de acoso, por parte de Javier Clemente. Un sinsentido que con el paso de los años me produjo un gran desgaste psicológico que pudo haberme hundido, pero que no lo hizo gracias a mi fortaleza y gracias al apoyo de mi entorno más cercano”. Según Sarabia, Clemente, “lo intentó todo. Que me traspasaran, retirarme de las alineaciones, provocarme para que pusiera mi salida en bandeja, pedir que me multaran, tratar de enemistarme con mis compañeros, tratar de socavar el apoyo que recibía de la afición y de los medios con sus acusaciones e insinuaciones”.
Como es habitual en él, Clemente no se quedó callado al conocer lo que Sarabia ha escrito y manifestó su opinión en una entrevista en Onda Vasca. “Me da pena por él, porque no tiene sentido lo que dice. Me da pena que muchos puedan decir que es un poco tonto”. Y defiende el técnico: “él quería ser titular y nos reunimos todos: le pregunté a ver a quién tenía que quitar para que jugara él”. Clemente asegura que la reconciliación entre ambos es una quimera: “Ahora cuanto menos cerca estemos, mejor, porque lo único que hacemos es estorbarnos. Lo del libro me ha sorprendido y los jugadores le pueden contradecir. Ha cumplido lo de plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. Le faltaba el libro y como estará aburrido se ha dedicado a escribirlo. Las tonterías que ha dicho”.
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