Copa del América: El Team New Zealand y el American Magic dominan el arranque de la competición

La Copa del América ya ha empezado. En la Barceloneta, la herida de Max Sirena, el pasional patrón del Luna Rossa Prada Pirelli que anhela llevar la Copa del América a Italia, se reabrió a los pocos minutos de empezar la segunda prueba de la primera jornada de la Regata Preliminar que se celebra en Barcelona a las puertas del inicio de la competición oficial, el próximo 29 de agosto. La competición actual, que termina el domingo 25 de agosto, está considerada como el arranque de la Copa del América, pero no tiene ningún efecto deportivo vinculado más allá de comprobar por primera vez el rendimiento de los equipos. Sirena tenía la oportunidad de superar el varapalo sufrido en 2021 contra el Team New Zealand, su rival este jueves, en la final de la Copa del América de Auckland: los neozelandeses se quedaron entonces con la Jarra de las Cien Guineas e Italia, nunca ganadora en la centenaria historia de la competición, lloró por una nueva decepción a la espera de cambiar algún día el destino de los perdedores.

Tres años después de la contienda oceánica, en el primer duelo oficial entre ambos escuadrones con el AC75 (el velero de 75 pies de altura con el que se debe competir), un fallo eléctrico tiró por tierra la reconquista. A los dos minutos de iniciar su cara a cara con el Defensor (como se reconoce a los defensores del título), su revancha, el Luna Rossa Prada Pirelli hundió su proa en plena virada tras perder el control del barco. Los kiwis mantenían el vuelo, solemnes sobre las aguas, mientras Sirena se lamentaba en tierra y sus tripulantes intentaban sin éxito recuperar la velocidad de un barco que quedó unos segundos a la deriva. Los problemas para Italia seguirían: pocos minutos después volvería a hundir el morro, uno de los peores escenarios para unos barcos pensados para volar sobre la superficie y minimizar el contacto con el agua.

La diferencia entre los últimos dos finalistas de la Copa ilustra lo que muchos temen a una semana de iniciar la competición oficial: el Team New Zealand parece ir por delante del resto. Se mostró solvente durante el recorrido (seis tramos de ida y vuelta en el campo de regatas situado frente a la playa de Barcelona), mantuvo prácticamente siempre el vuelo y alcanzó unos picos de velocidad consistentes con un viento de unos 12 nudos.

La suerte para Sirena y sus pupilos es que la regata preliminar actual no tiene efectos reales de cara a la Copa del América más allá de mostrar en qué punto se encuentran los equipos tras tres años de un secretísimo desarrollo tecnológico puesto al servicio de la navegación. Se celebra este jueves y el domingo 25 y es la primera vez que los equipos compiten con el AC75. En las dos regatas preliminares previas, realizadas en 2023 en Vilanova i la Geltrú y Yeda (Arabia Saudí), la competición se disputó con un barco más pequeño, el AC40. El problema es que tras un largo periodo de espera y sin poder comparar el rendimiento deportivo del AC75 con el resto de rivales hasta ahora, un pinchazo en la preliminar de Barcelona puede generar dudas en el proyecto. El Orient Express francés, el último equipo en sumarse a la competición, también mostró debilidades en sus dos regatas al mostrar dificultades para mantener siempre el vuelo.

Durante la celebración de esta regata preliminar, cada día se disputarán cuatro regatas cara a cara entre los seis equipos participantes: Team New Zealand, (Nueva Zelanda); Ineos Britannia (Gran Bretaña); Luna Rossa (Italia); Alinghi Red Bull Racing (Suiza); American Magic (Estados Unidos) y Orient Expres (Francia). Los dos escuadrones con más puntos (cada victoria da un punto) se jugarán el trofeo de esta prueba el domingo en un duelo definitivo. Además de la victoria del Team New Zealand sobre el Luna Rossa; el American Magic superó al Ineos; el Alinghi al Orient Express; y los italianos se resarcieron contra los franceses en la última contienda del día.

A partir del día 29 de agosto empezará lo serio con el arranque de la Copa del América, establecida en dos fases: la primera, una competición clasificatoria (la Louis Vuitton Cup) en formato de uno contra uno de la que saldrán cuatro semifinalistas. Todos los equipos se enfrentan dos veces contra el resto y cada victoria suma un punto. El Team New Zealand, clasificado directamente a la final como Defensor, también compite contra todos, pero sus regatas no puntúan. Se clasifican cuatro equipos para semifinales y el último queda eliminado. El ganador de la Louis Vuitton Cup se enfrentará en octubre al Team New Zealand en la gran final.

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