España se exhibe en los Mundiales de piragüismo y logra 13 medallas

13 medallas: 12 metales absolutos y una plata en paracanoe (modalidad adaptada a deportistas con discapacidad). Ese ha sido el balance de España en los Mundiales de Piragüismo disputados en Duisburgo (Alemania) y que ahora tienen el honor de ser los más sobresalientes de su historia. La selección nacional ha logrado además 15 de las 18 plazas posibles para los Juegos Olímpicos del próximo año. Sólo el K2 500 femenino, que se quedó sin plaza por tan sólo 28 milésimas, y el C1 1.000 masculino no sacaron sus billetes para París 2024.

Esto significa que España tendrá ocho embarcaciones clasificadas para los Juegos, donde podrán acudir en kayak un máximo de seis piragüistas por género. Y en canoa, un tope de tres por sexo. Estos, podrán participar en cualquiera de las pruebas previstas con un máximo de dos embarcaciones por país y prueba.

Estefanía Fernández deslumbró al obtener la tercera medalla de oro para España en la última prueba, la de K1 5.000 metros. La piragüista extremeña demostró su fortaleza y habilidad al cruzar la línea de meta en un emocionante final, superando a la canadiense Madeline Schmidt por un margen de poco más de un segundo. Las dos medallas de oro restantes llegaron en jornadas previas. Pedro Vázquez e Íñigo Peña se coronaron campeones en la prueba de K2 1.000 metros, mientras que Joan Moreno, Pablo Graña, Manuel Fontán y Adrián Sieiro se alzaron con la victoria en la categoría C4 500.

La oleada de éxitos del día para España se produjo este domingo en una hora frenética (entre las 11 y media y las 12 y media), cuando se sucedieron cuatro podios. Tano García y Pablo Martínez no pudieron igualar el oro de Halifax en C1 500, pero en una carrera muy apretada, le robaron la cartera a Francia en los metros finales y acabaron con el bronce.

También se alzaron con el bronce Adrián del Río y Rodrigo Germade en K2 500. El gallego y el madrileño fueron la apuesta de la Federación para amarrar otra plaza en París. La pareja habitual es la formada por Marcus Cooper y Germade (bicampeones mundiales), pero el primero se vio afectado por una bacteria en mayo y se decidió sustituirle por Del Río. Con sólo 15 sesiones juntos, repitieron metal para España.

Por su parte, María Corbera sumó su tercera plata en estos campeonatos tras las conseguidas en C2 200 y C2 500 con Antía Jácome. Otro que repitió fue Íñigo Peña, que se colgó el bronce tras el oro en K2 1.000 del sábado. En el C4 500, España logró un meritorio quinto puesto con canoístas nacidas todas (María Moreno, Claudia Couto, Valeria Oliveira y Antía Otero) nacidas entre el 2003 y el 2004.

El último día de competición dejó a España segunda en el medallero, sólo por detrás de la anfitriona Alemania (14 preseas), con un bronce más. El equipo nacional ya dominó el medallero el año pasado en Halifax (Canadá) con ocho metales (aunque entonces cuatro fueron de oro) y este año ha dado un paso más en su proyección. Por detrás, también lograron tres medallas de oro Canadá, China y Nueva Zelanda.

Tras este éxito en sprint, la Federación Española intentará ahora a afrontar la clasificación de las aguas bravas, con una selección encabezada por la triple medallista Maialen Chorraut el próximo mes en el canal olímpico de Londres. El piragüismo es uno de los buques insignia del olimpismo español y de sus medallas dependerá en buena parte el éxito de la delegación española en los próximos Juegos.

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