Las sanciones de la Euroliga a la batalla del Madrid-Partizán: cinco partidos a Yabusele, dos a Punter y uno a Deck y Lessort

La batalla del WiZink ya tiene castigos. El Juez de Disciplina de la Euroliga ha comunicado este viernes las sanciones impuestas al Real Madrid y al Partizán de Belgrado por la pelea que ambos equipos protagonizaron en el segundo encuentro de los cuartos de final disputado el jueves en el pabellón madridista. Yabusele ha sido sancionado con cinco partidos después de su agresión a Exum, Punter ha sido castigado con dos encuentros, mientras que Deck y Lessort han sido suspendidos un encuentro cada uno, todos ellos por los golpes que propinaron a jugadores del equipo contrario. Además, cada club ha sido multado con 50.000 euros. Las escenas de los jugadores intercambiando puñetazos han causado un gran bochorno en el mundo del baloncesto europeo.

El detonante fue una falta antideportiva de Llull a Punter cuando restaba 1m 40s para el final del choque y el Partizán dominaba claramente por 80-95. Los jugadores del Madrid eran ya presa de la impotencia al ver que la eliminatoria se encaminaba a ese 0-2 en contra antes de viajar a Belgrado el próximo martes. Punter se revolvió contra Llull al recibir ese fuerte golpe y el base estadounidense y el capitán español se encararon con los puños en alto. Fue entonces cuando el resto de jugadores intervinieron y la pista se convirtió en un ring en el que volaron los puñetazos: Punter, Deck, Lessort...

La acción más violenta la protagonizó Guerschon Yabusele. El pívot francés, de 27 años, 2,01m y 123 kilos, agarró por la espalda a Dante Exum (27 años, 1,98m y 97 kg) pasando un brazo por su cuello y lanzó al jugador australiano al suelo como si le hiciera una llave de yudo. La agresión fue tan salvaje que los árbitros y varios integrantes de los dos clubes, entre ellos el técnico del Partizán, Zeljko Obradovic, acudieron a separar a Yabusele y preocuparse por el escolta, que el curso pasado militó en el Barça. Exum tuvo que retirarse sin poder caminar por sí solo, y el médico del conjunto de Belgrado alertó sobre su estado: “El tendón del segundo dedo del pie se ha roto. Es una lesión seria. No he visto nada así en mi vida. Ha sido terrible. La forma en la que Yabusele le ha cogido es de cárcel o de suspensión de por vida. Le podría haber dañado la médula espinal o la cabeza y acabar con su carrera”.

Este viernes por la mañana, el pívot francés pidió perdón a través de las redes sociales. “Lamento profundamente mi comportamiento. El baloncesto es deportividad y amistad. Mis más sinceras disculpas al Partizán, un club con el que siempre hemos tenido una gran relación, a Dante Exum y su familia, a mis compañeros de equipo, a mi club y a todos los aficionados”, expresó Yabusele, que llegó al Madrid en el verano de 2021 procedente del Asvel y tiene contrato hasta 2025. También Llull se unió a las disculpas, como Rudy y Chus Mateo tras el encuentro. “Asumo mi responsabilidad por hacer esa dura falta que desencadenó el desastre posterior. Mis disculpas a todos los aficionados al baloncesto”, dijo Llull. El Madrid estudiará las sanciones internas que aplicar a los jugadores por los incidentes, independientemente de la decisión de la Euroliga.

La trifulca se saldó con 21 descalificaciones entre quienes participaron en la pelea estando ya en la pista en el momento de la acción y quienes saltaron desde el banquillo, aunque fuera para separar a otros compañeros. Según el reglamento de la competición, solo los entrenadores y los ayudantes pueden salir de la zona técnica y acceder al recinto de juego en estos casos. La larga lista de eliminaciones provocó que ninguno de los dos equipos contara con el mínimo de dos jugadores disponibles para continuar el encuentro, por lo que los árbitros dieron por finalizado el partido sin que se jugara el tiempo que faltaba.

La eliminatoria de cuartos, con ventaja de 0-2 para el conjunto serbio (nadie en la historia ha remontado ese resultado en una serie en la competición europea), viaja ahora a Belgrado, donde el próximo martes se disputará el tercer encuentro. El Stark Arena es el pabellón con la mayor asistencia media en la temporada regular en la Euroliga: 17.763 espectadores, por los 14.801 del Zalgiris. En este listado, el Madrid ocupa el décimo lugar con 7.625 aficionados por noche. El club serbio ha anunciado que todas las entradas para esa cita, casi 20.000, han sido ya vendidas. El entrenador del Partizán, Zeljko Obradovic, ganador de nueve Copas de Europa (entre ellas una con el conjunto blanco en 1995), intentó serenar los ánimos de cara a ese duelo que puede convertirse en una caldera de fuertes emociones y mucha tensión. “Lo que ha ocurrido no es bueno para el baloncesto, ni para la imagen de Real Madrid ni Partizán. No puede pasar esto nunca más. Desde este momento voy a intentar calmar a toda la gente en Belgrado, que no vayan a hacer nada. Quiero que se hable de baloncesto, no quiero que se hable de esto. Lo voy a repetir cada día”, expresó Obradovic. “Hay que mirar quién ha empezado y por qué ha empezado. Tú tienes que controlar tus emociones y no responder. Y cuando uno responde, pues pasa lo que ha pasado. Ya he hablado en el vestuario con los jugadores. Hay que controlar emociones y quien controla emociones tiene más posibilidades de hacer algo en el deporte”, añadió. La plantilla del Partizán fue recibida este viernes de madrugada en Belgrado por cientos de aficionados en el aeropuerto. El tercer partido, con bajas en los dos equipos y un sentimiento de bochorno, ya empieza a jugarse.

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