Isco contra la crispación
Con la afición de uñas, el Sevilla firma solo dos temporadas al mediapunta de 30 años
”Estás fuerte”, le dijo Monchi a Isco nada más saludarlo a su llegada a Sevilla. “Me he cuidado mucho”, contestó el futbolista malagueño de 30 años. Ya en la capital de Andalucía, el fichaje de Isco por el Sevilla se ha convertido en una las clásicas bombas del mercado veraniego. Isco debe pasar este lunes el reconocimiento médico para firmar el contrato que le una con el club andaluz por los dos próximos años. El entrenador, Julen Lopetegui, tendrá a su disposición a uno de los jugadores que con más insistencia solicitó al director deportivo. Un futbolista con el que coincidió en el Madrid y, sobre todo, en la selección española. El mejor Isco con España correspondió con la etapa del vasco al frente de la selección.
Isco encuentra trabajo después de acabar contrato en el Madrid el pasado 30 de junio. Allí formó parte del selecto club de jugadores capaces de ganar cinco Champions (2014, 2016, 2017, 2018 y 2022). Desde entonces, ha venido entrenándose en solitario mientras su entorno realizaba contactos con equipos como la Roma, el Milan o incluso el Betis. En el conjunto verdiblanco su gran valedor era el técnico, Manuel Pellegrini, promotor en el Málaga del despegue de Isco en la élite en las temporadas 11-12 y 12-13. A pesar de la insistencia del entrenador chileno, la operación era inasumible para el Betis en el aspecto económico salvo si se producía la venta de su gran estrella, Fekir.
En este periodo, el Sevilla fue el equipo que más apostó por Isco. Bajo la petición de Lopetegui, Monchi comenzó a superar sus reticencias para hacer una oferta de tres millones de euros brutos anuales por el centrocampista. Una oferta que el futbolista tardó un mes en aceptar. Hasta que en la mañana del domingo el Sevilla anunció de manera sorpresiva el acuerdo con el mediapunta, que viajó de inmediato a la capital de Andalucía.
Fuentes cercanas al fichaje aclaran a este medio que la operación se ha adelantado en el tiempo. El primer motivo es el mal ambiente que se vive en torno al Sevilla, con una afición que pitó a su equipo el pasado sábado en el partido de presentación ante el Cádiz en el Trofeo Antonio Puerta. Ganó el Sevilla, pero su gente no acaba de digerir un nuevo proyecto de la mano de Lopetegui, del que esperan pocos cambios en un juego que no les satisface a pesar de haber cumplido con el objetivo de estar en Champions por cuarta ocasión consecutiva.
La bronca en Nervión aceleró las maniobras de Monchi. El exitoso director deportivo ha variado en esta ocasión su casi infalible método. Monchi apuesta por un futbolista de 30 años, con escasa posibilidad de revalorización y que no ha realizado la pretemporada. Con Isco, además, no parece que el proceso de selección del futbolista haya sido demasiado meticuloso, ya que de Isco se sabe todo y se han saltado los habituales y complejos seguimientos que el Sevilla realiza a los jugadores que elige para fichar.
La decepción Suso
Las dos temporadas que firma Isco no son nada usuales en un futbolista de 30 años. A esa edad, cuando los jugadores tienen la iniciativa y controlan su carrera, lo normal es que firmen por cuatro o cinco años. Isco lo hace por dos, los mismos que le queda de contrato a Lopetegui como entrenador del Sevilla, en una relación que para muchos no es casual. Parece evidente, además, que Isco ha aceptado la oferta económica del Sevilla de tres millones anuales, alejada de las altas cantidades que percibía en el Madrid pero estimable si se le unen las variables que puede cobrar por objetivos.
Otro factor que ha influido en la aceleración del proceso ha sido la lesión de Suso en el choque amistoso ante el Leicester el pasado 31 de julio. Se trata de una pequeña dolencia muscular, pero las alarmas han saltado después de que el gaditano estuviera inédito la pasada temporada por una grave dolencia.
La conjunción de todos estos factores y la resolución de la salida de Koundé han hecho que Lopetegui disponga ya de uno de los jugadores por los que siente admiración. Junto a Isco, desfilarán jugadores de parecido corte como el Papu, Rakitic, Suso, Lamela, Óliver Torres o el Tecatito Corona. El de Isco es el tercer fichaje del Sevilla para el curso 22-23 después de los del central Marçao (12 millones al Galatasaray) y Álex Telles, lateral izquierdo cedido por el Manchester United. Isco ha jugado en el Málaga y en el Madrid, donde ganó, entre otros títulos, cinco Champions, tres Ligas y una Copa del Rey, Ha sido 38 veces internacional con España, haciendo 12 goles. El Sevilla comenzará la Liga el próximo viernes en Pamplona ante Osasuna (21.00 horas).
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