Al-Khelaifi revoluciona el pádel
El presidente del PSG se une a los jugadores para crear Premier Padel, un circuito mundial con premios insólitos que esta semana celebra su torneo de Madrid
El madrileño Alejandro Galán, líder del ránking mundial del pádel, resume el momento en que su deporte cambió para siempre: “Nos juntamos con Nasser [Al-Khelaifi] y él nos hizo una oferta; a partir de ahí, nuestro deber como autónomos es defender el derecho al trabajo”.
Hasta ese día, 15 de noviembre de 2021, el pádel profesional se desarrolló bajo la campana de hierro de World Padel Tour, la empresa que gestionaba el único circuito relevante en el mundo, y que gozaba del servicio de todos los jugadores en calidad de autónomos vinculados por contrato con carácter exclusivo. El que daba un paso al costado quedaba fuera del pádel: jurídica y económicamente.
El régimen no tenía fugas hasta que el 15 de noviembre pasado, con motivo del Mundial de Qatar, el anfitrión, Al-Khelaifi, abrió brecha. Presidente de la federación de tenis y pádel de Qatar, presidente del Paris Saint-Germain, y presidente de QSI, el fondo soberano de inversiones deportivas que ha colocado a su país en el epicentro de algunos de los proyectos más asombrosos de la industria del espectáculo, Al-Khelaifi vio en las paletas un filón.
“Conocí a Nasser en la inauguración del Mundial”, recuerda Luigi Carraro, presidente de la Federación Internacional de Pádel. “En la cena hablamos de la organización del pádel y en tres minutos coincidimos en que se podía construir algo importante. Nos juntamos con los jugadores y hablamos toda la noche. Ellos le expresaron a Nasser todas las cosas que les incomodaban y a partir de ahí nació este proyecto revolucionario. Es difícil encontrar un modelo de gestión deportiva tan perfecto. Porque aquí tienes a la Federación Internacional, a la asociación de jugadores, PPA, y al mejor socio comercial que existe, porque guste o no guste, QSI es el mejor”.
Al-Khelaifi les propuso crear Premier Padel, un circuito internacional que se retransmitiría por las grandes cadenas de deportes y que atraería patrocinadores a una escala desconocida, tras pactar bolsas de premios de más 200.000 euros (95.000 para la pareja ganadora) en cada uno de los seis majors previstos para la primera temporada: Doha, Roma, París, Madrid, Mendoza (Argentina), y Monterrey (México).
“Más allá de las condiciones económicas”, dice Galán, “lo que más valoro de Premier Padel es la libertad de poder elegir cuándo y dónde jugar sin depender de una empresa privada”.
World Padel Tour respondió denunciando a la federación internacional por competencia desleal y exigiendo hasta 49 millones de euros de indemnización a los palistas por romper su compromiso de exclusividad. El director general de WPT, Mario Hernando, no respondió a la llamada de este diario. Los jugadores no se arredraron. “Estamos haciendo lo correcto para que el deporte crezca”, dice el brasileño Pablo de Lima, uno de los palistas más destacados de la última década. “Han dicho que somos mercenarios. Estamos hablando de unas condiciones mínimas para vivir. Hay jugadores del top 100 que en los últimos tres años han facturado cinco mil euros. Llamarlos mercenarios es una crueldad. Con Premier Padel muchos jugadores podrán vivir solo del pádel”.
Alejandro Villaverde, abogado de la asociación de jugadores PPA, denuncia un vínculo leonino: “La relación contractual que tienen los jugadores con WPT es una esclavitud moderna. Los jugadores cumplirán sus obligaciones jugando todos los torneos que tengan pendientes. Lo que no podemos validar es una exclusividad impuesta que es contraria al tratado de la Unión Europea y que nos hace cómplices de un monopolio. Hasta ahora, chicos que están con un ránking 60 han tenido que hacer otros trabajos para costearse sus desplazamientos a los torneos. Nuestra aspiración más urgente es que los 100 primeros del ránking vivan y se dediquen exclusivamente a jugar al pádel. Esto pasa por un mercado abierto”.
Tras reunir a más de 25.000 espectadores en Roland Garros y más de 30.000 en el Foro Itálico, Premier Padel espera batir su récord de asistencia en el WiZink Center de Madrid, durante el campeonato que se disputa desde ayer hasta el sábado. Para disgusto de la Federación Española, que observa con alarma el conflicto con WPT, empresa muy próxima a ellos. “Todo lo que venga a España es bienvenido si vienen como nos gustaría”, dice Ramón Morcillo, el presidente de la federación. “Nos gustaría que Premier Padel tenga categoría femenina; en WPT las mujeres tienen los mismos premios que los hombres. En España el pádel es un boom gracias a que un 40% de las licencias son de mujeres”.
“Queremos hombres y mujeres”
Desde el sindicato de jugadores señalan que las mujeres todavía no se han atrevido a enfrentarse a WPT. Puede que no tarden. Ziad Hammoud, mano derecha de Al-Khelaifi en QSI y ejecutivo por excelencia de Premier Padel, señala que su intención siempre ha sido crear un circuito mixto: “Aquí tienen que estar hombres y mujeres”, dice. “La idea de la inversión tiene una parte emocional, ya que con Nasser y Luigi vimos que había cosas que no cuadraban con el nivel de profesionalismo y calidad de vida que deberían tener los jugadores. Lo segundo es buscar beneficios”.
“El pádel”, observa Hammoud, “es el deporte que crece más rápido en el mundo y queremos darle visibilidad. España es claramente el país del pádel y la capital del pádel es Madrid. Pero el gran crecimiento vendrá de Italia, Francia y los países nórdicos. Queremos replicar con el pádel lo que hemos hecho con el PSG”.
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