_
_
_
_

Chus Mateo toma las riendas para intentar clasificar al Real Madrid para la final de la ACB

El segundo de Pablo Laso, invicto en el banquillo madridista, dirigirá al equipo blanco en el Buesa ante el Baskonia tras el infarto que sufrió el entrenador

Jon Rivas
PlayOffs ACB - semifinal - jornada 3
Baskonia
Baskonia
77 85
Finalizado
Real Madrid
Real Madrid
Chus Mateo
Chus Mateo, durante un partido del Madrid en el Wizink Center el pasado diciembre.Sonia Canada (Getty Images)

Chus Mateo (Madrid, 53 años) está ahí para las situaciones complicadas. Cuando sancionaron a Pablo Laso; cuando el primer entrenador se infectó con la covid, o ahora, con el técnico convaleciente, aunque ya en casa, después de un infarto de miocardio que, como poco, le va a apartar de los partidos que todavía le restan por jugar al Real Madrid. Sí, es una situación complicada, y no solo por las circunstancias que envuelven el accidente cardíaco de Laso, que, como es lógico, tiene un componente emocional con todos los que lo rodean, y en especial en la plantilla, sino también por las bajas de un equipo en cuadro.

El trabajo de Laso se concreta en las dos victorias contundentes en los dos primeros partidos de la semifinal ante el Baskonia, aunque ahora, al Real Madrid le toca el Buesa. Un triunfo les llevaría directamente a la final de la ACB, y a esperar rival entre el Barcelona y el Joventut.

Pero el Real Madrid que juega en el Buesa no puede contar con Thompkins, ni con Llul, lesionado en el primer partido, ni con Abalde, así que se queda en cuadro en la posición de base, porque tampoco estará Heurtel, que después de semanas de ostracismo, reapareció el sábado, jugó tres minutos y se lastimó el tobillo, por lo que tampoco ha viajado a Vitoria. Mateo, segundo de Laso desde 2014, tendrá que echar mano de Juan Núñez, el junior que se está haciendo uno más en el equipo con tantas bajas. No se asusta. Ha dirigido cinco partidos al Real Madrid como entrenador principal, y ha ganado los cinco, aunque en Vitoria, frente al Baskonia (21.00 horas, Vamos), las circunstancias serán diferentes. “Cuesta centrarse, y vamos a seguir pendientes de Pablo, pero a partir de ahora solo va a estar el Baskonia en nuestras cabezas, vamos a tratar de que los jugadores también lo hagan, somos profesionales”, apuntaba en la previa. “Hay que adaptarse a todas las circunstancias de una temporada que no están siendo fácil, una campaña dura, en la que hemos llegado a dos finales importantes que hemos perdido por poquito y ahora deberemos rehacernos de una cosa más grave, que Pablo está jugando una final y tiene que ganarla. Debemos recolocarnos”.

Laso ya está en casa, recuperándose, y Chus Mateo, al hilo del infarto, hacía mención a las palabras de su madre: “Siempre me decía que esto es un juego, pero nos gusta hacerlo siempre tan bien, le damos tanta trascendencia a ganar o perder, que cuando las cosas se ponen difíciles y hay mucha presión, a veces pasan estas cosas”. Reconoció que no había hablado con Laso: “Cuando recibimos la noticia, Pablo nos mandó un mensaje genérico, que iba a tener que estar unos días apartado, su familia sabía su situación, nosotros lo supimos con ese mensaje, y a partir de ahí su teléfono no estaba operativo. Nosotros tampoco queremos molestar ni dar la lata. Hablando con la familia, las noticias son optimistas, y estamos contentos por ello, porque parece que puede quedarse solo en un susto, en un aviso”. Para Mateo, “de lo que se trata, es de que nosotros sigamos adelante con el trabajo que él ha hecho”.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_