El Atlético de Madrid pide disculpas a sus aficionados por el proyecto de la Superliga
Miguel Ángel Gil, consejero delegado del club, justifica el adiós al proyecto de nueva liga europea: “Las condiciones y circunstancias bajo las que se iba a producir nuestra incorporación no se han cumplido”
Miguel Ángel Gil, consejero delegado del Atlético de Madrid, envió el miércoles por la noche una carta a todos sus socios pidiendo disculpas “por la confusión que se ha generado en los últimos días” a propósito del proyecto de Superliga europea presentada por 12 equipos ingleses, españoles e italianos, entre los cuales estaba el conjunto colchonero, y tumbada en tres días por la presión social y por el choque cultural que suponía su modelo. El principal propietario del club justifica la intentona separatista de la UEFA en la búsqueda continua de “la sostenibilidad del fútbol en unos momentos de extrema dificultad económica”. Gil Marín recuerda que el Atlético ha logrado esta temporada la “novena clasificación consecutiva para la fase de grupos de la Champions League”, éxito que achaca al “enorme esfuerzo” realizado por el club “para consolidarse entre los grandes equipos de Europa” y del que hace partícipe al “apoyo de los socios y de todos los aficionados”.
“El club decidió aceptar la invitación para formar parte de la Superliga con la intención de defender los intereses del Atlético de Madrid desde dentro de una organización que tenía como uno de sus objetivos principales dialogar y negociar con la UEFA la búsqueda de nuevos formatos que fomenten una gestión equilibrada de los derechos deportivos y económicos e incluyendo criterios de solidaridad con toda la familia del fútbol”, subraya Gil Marín en su carta a los socios atléticos. El dirigente rojiblanco argumenta que la entidad no se podía permitir “no estar en ese grupo de equipos que son los principales generadores de contenidos del mundo del fútbol”.
“Sin embargo, las condiciones y circunstancias bajo las que se iba a producir nuestra incorporación a dicho grupo, no se han cumplido y, en consecuencia, en el día de hoy hemos decidido no consolidar finalmente nuestra adhesión al proyecto”, incide Gil Marín, que explica así por qué el Atlético se da de baja de un proyecto que apoyó en la madrugada del domingo al lunes. Ante esta situación creada, Gil Marín tiende la mano al diálogo, defendiendo al tiempo los intereses rojiblancos: “El Atlético de Madrid seguirá participando siempre que sea posible en foros, organismos e instituciones que busquen soluciones encaminadas a mejorar nuestro deporte. Nuestra obligación es seguir dotando al club de estabilidad deportiva, económica y social para las próximas décadas”.
Por último, Gil Marín recuerda la situación en la Liga del Atlético de Madrid, colíder junto al Real Madrid aunque con un partido menos que el equipo blanco, a falta de 7 jornadas. “Puede que algunos aficionados no compartan a veces ciertas decisiones, pero debes saber que todas ellas se toman desde el convencimiento de que son las mejores para el Atlético de Madrid”, dice, para concluir reclamando continuar con el crecimiento de los últimos años experimentado por el equipo: “Todos los desafíos están a nuestro alcance si permanecemos juntos, si nos respetamos y ayudamos y, si seguimos trabajando con humildad y con mucho esfuerzo, estoy convencido de que los conseguiremos”.
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