El fulgurante vuelo de Benzema
Santillana y Morientes, dos históricos delanteros cabeceadores del club, analizan por qué el francés se ha convertido en un gran rematador aéreo tras la marcha de Cristiano
La categoría futbolística de Karim Benzema (Lyon, Francia, 33 años) crece sin límites. Desde la siempre egoísta posición de delantero, su inteligente y solidaria manera de entender el juego reúne un compendio de capacidades. A su inherente técnica individual, añade la simplicidad y la facultad para mejorar aquellas acciones que pasan por sus pies, pero se gestan en su cerebro. Ahora, además, es obligado resaltar sus dotes realizadoras: 24 goles en lo que va de temporada, incluidos siete de cabeza, su nueva arma.
Es el Benzema más total. Acaba de superar en la Liga a otro nueve clásico de la historia del Real Madrid, Carlos Santillana. Ante el Eibar marcó su tanto 187 y ya solo tiene por delante a Cristiano Ronaldo (312), Raúl (228) y Alfredo di Stéfano (216). En la Champions suma 70, a uno de Raúl y a dos de Lewandowski. Es el único futbolista, junto a Messi, que ha marcado al menos una diana en las 16 últimas ediciones de la Liga de Campeones. Multi Karim. En su cada vez más acusada faceta anotadora, existe un antes y un después desde la marcha de Cristiano Ronaldo. El portugués se fue a la Juventus habiendo firmado 36 goles a pase de Benzema mientras el francés se quedó en el Bernabéu habiendo marcado 27 en balones recibidos de Cristiano.
Dentro de su amplio repertorio finalizador, Karim está llamando especialmente la atención por su facilidad para el juego aéreo, llegando a posiciones de remate casi siempre en el palo más alejado a la zona desde donde llega el centro. Esa era el área de influencia de Cristiano, que acaparaba casi en exclusiva la variante aérea. Desde que llegó al Bernabéu en 2009, se convirtió en el mejor cabeceador de las grandes Ligas, con 79 tantos, por los 26 de Benzema.
El remate de cabeza no era un secreto para él. Simplemente, estaba CristianoCARLOS SANTILLANA
Entre los futbolistas en activo, en el ranking de goles de cabeza, Benzema ya ocupa lugares de privilegio tanto en la competición continental (tercero mejor, con 14 tantos, por detrás de los 26 de Cristiano y los 16 de Lewandowski) como en la Liga (28, solo superado por los 38 de Sergio Ramos). En sus primeras nueve temporadas de blanco, Benzema marcó 26 goles con la testa. Desde que se marchó Cristiano, en dos temporadas y media, ya suma 22. Su explosión llegó justo en el primer ejercicio (2018-19), en el que se elevó hasta los 11 goles. La pasada hizo cuatro y en la presente lleva siete (cinco en Liga, máximo realizador actual junto a En-Nesyri, y dos en Champions).
Corpulento y buena colocación
Históricamente, el Real Madrid ha sido tierra de grandes cabeceadores: Santillana, Zamorano, Morientes… Nadie mejor que los especialistas para entender esta nueva dimensión de Benzema. Carlos Alonso González (Santillana del Mar, 68 años), que marcó 76 goles por el aire en sus 18 temporadas como blanco, felicita al francés por haber superado su marca de 186 dianas totales y reconoce estar sorprendido por esa nueva versión del francés. “Soy un enamorado de Benzema en su concepción general del fútbol. Muchas veces le sigo en un partido para ver si pierde un balón, y no lo hace casi nunca. Sin Cristiano, las condiciones del equipo han cambiado y él juega un poco más adelantado. Como tiene unas condiciones técnicas y físicas extraordinarias, se ha amoldado bien a esa nueva posición y, sin olvidar esa labor de enlace, sabe que tiene que llegar a posiciones de remate a las que antes no tenía necesidad“.
Santillana valora el físico del francés. “Es corpulento, más alto de lo que pueda parecer, y demuestra que el remate de cabeza no era un secreto para él. Simplemente, estaba Cristiano. Ahora es aún más completo. Él ya tenía dentro el sentido y el olfato de gol, ahora lo que hace es aprovecharlo también en los balones por alto. Sabe colocarse y buscar la zona que antes era del otro. Busca bien la espalda del defensor, va mejor al segundo palo. No es un especialista como Aduriz, Morientes, Zamorano o yo, pero su fuerza y su técnica le permiten llegar con ventaja”.
Me está sorprendiendo, se mueve muy bien. La forma de rematar es la de un cabeceador de toda la vidaFERNANDO MORIENTES
En la comparación con él mismo, apunta varias diferencias. “Yo buscaba más el primer palo, la anticipación, la sorpresa. Mi físico no era potente como el suyo o el de Sergio. Para mí era difícil ante defensores de 1,90. Me las apañaba. Lo más importante es que Karim se adaptado muy bien a las necesidades del equipo. No salta como Cristiano, pero tiene coordinación de salto y sabe colocarse. Y le da muchas alas al equipo”.
Saber quién centra
Fernando Morientes (Cilleros, Cáceres, 44 años) también se rinde a la vocación tardía del delantero galo. “Antes tenía a Cristiano, que cabeceaba aún mejor y se ganaba la posición. No sé si él se sentía cohibido, o es que le dejaba al portugués el mejor movimiento y él hacía el complementario. Caía mucho a la segunda jugada. Ahora tiene más espacio, más movimiento. Me está sorprendiendo, se mueve muy bien. Cuando la jugada es profunda, busca el segundo palo, gana los balones atrás, cuando lo normal es que los cabeceadores, como era mi caso, busquemos más el primero, la anticipación. La forma de rematar es la de un cabeceador de toda la vida”.
Como autor de cuatro goles de cabeza en un mismo partido (Las Palmas, 2002), considera básica la intuición. “Tienes que saber las cualidades de tus compañeros que centran. Quién lo hace fuerte, quién no llega. En mi época, Salgado centraba mucho al primer palo. Con Figo me podía llegar a cualquier sitio porque la tiraba muy bombeada y eso a mí, que era alto, me beneficiaba porque no era necesario adelantarme. Tenía que saltar y ahí me sentía como pez en el agua. Karim caza bien las que le llegan desde la derecha, sabe donde tiene que ir a por los centros y llega, vamos que si llega”.
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