Kron, un danés imberbe, primer líder de la Volta a Catalunya

Andreas Kron, un danés novato en las grandes ligas, un recién llegado de 22 años, es el primer líder de la Volta de los 100 años después de imponerse en la meta de Calella al viejo Luis León Sánchez, el representante de toda una generación que sufre, el más sacrificado para sacar adelante una fuga de cuatro armada a 23 kilómetros de la llegada.

Peter Sagan, que enfermó de covid en Canarias en febrero y aún no ha recuperado un mínimo de forma, no aguanta el ritmo del pelotón en las primeras cuestas del Montseny y se deja ir. Pocos kilómetros más adelante, le imita Chris Froome, quien no logra tampoco en Israel recuperar su vigor, ni la fuerza en la pierna rota, casi dos años después del accidente que truncó su carrera de campeón. Una generación, la de los treintañeros del pelotón, se desintegra nada más comenzar la primera etapa de la Volta centésima.

El Movistar, insensible, sigue subiendo el ritmo. Echaba de menos sus carreras el mejor equipo español, la Volta es su territorio, hurtado el año de la pandemia. Valverde está fuerte, hacen ver. Con toda por él, que tiene 40 años y no quiere ser uno más de los que sufren. El honor de los viejos quiere portar el murciano, hasta que a 23 kilómetros de la llegada el color azul movistar desaparece de la cabeza.

Es entonces, al pie de la subida a Collsacreu, cuando otro viejo murciano, Luis León Sánchez, 37 años y radiante en su maillot blanco de campeón de España, asume la responsabilidad de salvar a su generación. Calella, la meta, está allí abajo, azul y sol. Y hacia allá se lanza Luis León, cuya arrancada solo acompañan otros tres corredores, tres chavales que no han cumplido los 25: un francés con nombre de colonia, Rochas; Kämna, un alemán que ya se ilustró con victoria en la montaña del último Tour, y Kros, el más jovencito de todos con su maillot del venerable Lotto belga, que disputa la primera etapa de su vida en una carrera del WorldTour al que acaba de ascender desde un equipo danés de segunda.

Y aunque es Luis León, el mulo de Mula hiperactivo, quien más trabaja para lograr que triunfe un intento que nunca tuvo más de 40s de ventaja, y el que lo consigue pese al doble esfuerzo del Ineos de Adam Yates y el Bike Exchange de su gemelo Simon, por primera vez en su vida rivales de equipo en una misma carrera, no es él precisamente el más vivo en la última recta, pues se ve encerrado cuando arranca decidido Kron y no puede remontar. El honor de los viejos queda una vez más esta temporada virgen. Y ni siquiera Valverde, que lo pelea, gana el sprint por el quinto puesto. Superado por otros tres que aún no han cumplido los 30, Smith, Mohoric y Schelling, termina octavo.

Kron, y su perfil más de clasicómano belga que de carreras por etapas con contrarreloj y montaña, como la Volta, partirá en la contrarreloj del martes en el Lago de Banyoles (18,5 kilómetros) con 4s de ventaja, gracias a la bonificación, sobre Luis León, un especialista en la cuestión, y 26s sobre los favoritos del pelotón, Marc Soler, Joao Almeida, Geraint Thomas…

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