Los socios del Barça podrán votar por correo
Laporta pide cobertura legal para evitar cualquier tipo de impugnación después del Decreto Ley aprobado por la Generalitat
Los socios del Barcelona podrán votar inicialmente por correo postal el próximo 7 de marzo —si las elecciones no se adelantan como pretenden algunos implicados— después de que los comicios previstos para el día 24 de enero fueran aplazados por el confinamiento municipal a causa de la covid-19. La posibilidad de votar por correo, no contemplada por los estatutos del club ni por la ley, ya había sido explorada —no activada— por la directiva del expresidente Josep Maria Bartomeu, antes del voto de censura que provocó su dimisión, y por la actual gestora que dirige Carles Tusquets.
A pesar de la petición también de varios precandidatos a los comicios, los distintos rectores azulgrana se han pasado la pelota con la Generalitat. Hasta que este martes el Govern aprobó un Decreto Ley que “habilita el voto por correo postal y el voto electrónico” en las elecciones de entidades deportivas de Cataluña. La diferencia con respecto al Barcelona es que el 7 de marzo solamente se podrá votar por correo postal y no por el electrónico por tratarse de un proceso ya iniciado en el momento de entrada en vigor de la Ley.
Ahora le corresponde al Barça activar precisamente el proceso, que contempla también aumentar las sedes para la votación, y dar cobertura legal a los candidatos para evitar cualquier tipo de impugnación. La duda está en saber si el decreto es de aplicación automática o por el contrario exige la convocatoria y aprobación de la asamblea de compromisarios del Barça. Queda por delimitar, además, si el cambio puede ser asumido por una gestora cuyas funciones están muy limitadas. Tusquets tiene previsto analizar este miércoles la situación, que incluye la posibilidad de un adelanto de la fecha, en una reunión con los tres candidatos: Joan Laporta, Víctor Font y Toni Freixa.
Laporta se ha programado para volver a ser presidente y estaba preparado para asumir el cargo el día 24. Las 9.625 firmas validadas le situaban como el favorito frente a Font y Freixa hasta que los comicios fueron aplazados de momento por siete semanas.
El cambio de fecha no ha variado el discurso de un aspirante cuya mayor preocupación es que no le cuelen un gol después de alargar un partido que domina con ventaja en el marcador: “A mí, en el 2003, ya me la colaron cuando ocho días de mandato fueron contabilizados como un año por la fecha de posesión del cargo, circunstancia que supuso cargar con las cuentas de la junta de Joan Gaspart”, afirma Laporta, quien ha remitido un escrito a la Gestora para exigir garantías sobre el proceso electoral del 7-M.
“Quiero que se vele por su pureza y se explique muy bien para que no haya dudas y se evite cualquier impugnación”, argumenta. “Aspiro a que la gestora se comprometa, concrete la fecha, las condiciones y se organice bien para no viciar el proceso electoral. Me aseguran que disponen de un informe jurídico de un catedrático reconocido [Bufete Maresca] que explicita que no se van a dar impugnaciones. También me dicen que hay un segundo informe de las autoridades médicas que lo suscribe. Veremos”, insiste Laporta.
Opciones de mercado
El candidato favorito acató un aplazamiento que a su juicio va en contra de los intereses del Barcelona. “Me hicieron un tres contra uno”, afirma en referencia a la gestora y a las candidaturas de Font y Freixa. “La función de la gestora es la de convocar elecciones y, si se hubiera querido, se podían haber celebrado el 24. Había la manera de poder aplicar las medidas necesarias, sanitarias y de participación, para la votación. Alcanzaba con el certificado de autoresponsabilidad de la Generalitat en cuanto a la movilidad, pero faltó valentía. Ahora también habrá que prever que los socios deberán moverse para acudir a la oficina postal”, concluye, después de sentirse “víctima de los intereses políticos y de la gestora”. El argumento le sirve para manifestar su independencia respecto a cualquier grupo político, mediático y económico: “Estoy desvinculado de la política”.
“Hemos perdido la oportunidad de empezar a revertir ya mismo la situación del Barça”, acaba Laporta. “Se nos está escapando Messi y también se nos escapan oportunidades de mercado. Hay que controlar gastos, decidir inversiones, evitar el desgobierno”, afirma. El expresidente se manifestó precisamente en contra de fichar en invierno a Eric García porque la crítica economía del club no permite incorporarlo del Manchester City a pesar de ser una de las peticiones de Koeman —el técnico insiste en fichar al menos un central—. Laporta calcula muy bien sus pasos para no variar el pronóstico de los comicios: “No me puedo confiar”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.