El Mirandés se siente ninguneado

Miranda de Ebro es un lugar apacible, de gente trabajadora. Este invierno está siendo más clemente de lo habitual, y en eso salen ganando sus habitantes. Pero a veces se enfadan, y cuando el enojo tiene que ver con el fútbol, y el Mirandés, en una ciudad monocromática en gustos balompédicos, la indignación se extiende como la pólvora. En Anduva y sus alrededores consideran un agravio que la Liga de Fútbol Profesional no haya atendido a sus requerimientos y se niegue a modificar los horarios de la jornada trigésima.

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El Mirandés juega el domingo 1 de marzo frente al Girona, a las 12.00 horas, cuando el miércoles (21.00 horas) afronta el partido más trascendental de su historia: la vuelta de la semifinal de Copa del Rey frente a la Real Sociedad. El mosqueo rojillo no viene por este horario, sino por el del equipo donostiarra, que juega el viernes 28 frente al Valladolid en el Reale Arena. En Miranda no les parece justo que el equipo de Primera División tenga dos días más de descanso que el de Segunda. Fuentes de LaLiga reconocen haber recibido una solicitud formal del Mirandés para modificar la fecha del partido, pero la comisión encargada de establecer los horarios no lo consideró oportuno.

"Las fechas, las parrillas de programación, están conformadas y no se va a cambiar". El agravio que alega el club de Segunda División, dicen, no es tal. "Cuando el Mirandés eliminó al Coruxo, de Segunda B, la eliminatoria fue un martes y el equipo gallego jugó el domingo anterior". No hay discriminación, es el mensaje desde la LFP.

Sin embargo, desde la Federación Española de Fúbol han intentado mediar para que se modifique el horario del partido del Mirandés contra el Girona. Según informa el diario AS, el director de Competiciones de la RFEF, Alfredo Olivares, envió una carta a LaLiga, para que “iguale su descanso con de la Real Sociedad para que su rival no tenga dos días más de descanso”, y reconsidere el horario. Según la información, es la segunda vez en la que la Federación trata de interceder. La primera vez fue por vía telefónica.

El entrenador del Mirandés, Andoni Iraola, en la previa del partido aplazado frente al Zaragoza, estalló: "Nos han dicho por parte de LaLiga que el partido que teníamos contra el Girona, previo a la semifinal contra la Real, no nos lo van a adelantar. Al final, hay decisiones que me cuesta mucho entenderlas", aseguró. "La diferencia que ya existe inherente a los equipos se hace más grande con este tipo de decisiones. De tener tres días de descanso, que vamos a tener nosotros, a tener cinco días, que va a tener la Real, hay una diferencia muy grande".

Además, esa ventaja se incrementa porque las circunstancias han determinado que la Real descansara el pasado domingo —por la suspensión de su partido en Ipurua—, y el Mirandés tenga que jugar entre semana ante el Zaragoza, otro encuentra aplazado. "De jugar entre la ida y la vuelta cuatro partidos, como vamos a jugar nosotros, a jugar no sé si dos o tres, depende lo que decidan con el partido aplazado con el Eibar, pero si es dos todavía peor, la diferencia es sustancial", apuntó Iraola.

El técnico guipuzcoano afirmó que no se trata de un trato de favor a la Real, sino de un acto discriminatorio hacia el Mirandés: "Se está cometiendo una injusticia con nosotros y hay que decirlo. Vamos a jugar con un día menos de descanso que el Zaragoza, pero es algo entendible, normal de la competición, además es un partido de Liga. Pero que en un partido tan importante como la semifinal de la Copa del Rey, que pasen estas cosas, se me hace difícil de entender. No es que intenten beneficiar a la Real, ni mucho menos. Si hubiera sido el Sevilla, el Valencia o el Atlético de Madrid, creo que hubiera sido igual".

Para el entrenador del equipo burgalés, "hemos pasado de ser el modelo y el símbolo de una Copa de los modestos, y a medida que vamos aumentando nuestras opciones, estamos empezando a ser un equipo que molesta más que otra cosa". Asegura Iraola que cuando la LFP quiere cambiar un horario, lo hace: "Nos han cambiado el partido con el Albacete esta semana, con siete días de adelanto. A la Real con Osasuna, dos veces el partido. Casi todas las semanas hay algún cambio. Si se quiere cambiar, se puede cambiar, pero han decidido que no y ya está".

No quiere el exjugador del Athletic, que sus palabras se interpreten como un ataque a la Real Sociedad: "Con ellos hay una relación fenomenal, tenemos tres jugadores suyos y nos están permitiendo que jueguen contra ellos. Es un equipo que da ejemplo en muchas cosas. La relación entre las aficiones es maravillosa. En Anoeta dieron una lección. Aquí, una cuarta parte del campo va a ser de la Real. Y estoy convencido de que va a ser lo mismo. El problema es entre el Mirandés y la gente que manda en el fútbol".