Pellegrini para reconstruir el Betis

“Necesitamos un entrenador de postín”. La frase planeaba en el Benito Villamarín justo después de que Rubi fuera destituido el pasado 21 de junio. El Betis había perdido en San Mamés ante el Athletic (1-0) y era el 14º clasificado, a 13 puntos de su objetivo europeo, meta obligada según sus dirigentes con un presupuesto cercano a los 200 millones de euros. El Betis aceleró las gestiones para contratar a un nuevo entrenador mientras Alexis, director deportivo, se hacía con el banquillo de manera provisional. Finalmente, el elegido ha sido Manuel Pellegrini, que ha acordado su llegada con un contrato de dos temporadas con opción a una tercera. A sus 66 años, el entrenador emprende su sexta andadura en un banquillo europeo: Villarreal (2004-2009), Real Madrid (2009-10), Málaga (2010-2013), City (2013-2016) y West Ham (2018 a diciembre de 2019).

Pellegrini regresa a LaLiga después de dejar un aroma de buen fútbol y éxitos en el Villarreal; una temporada en el Madrid, donde no pudo con el Barcelona de Guardiola pese a sumar 96 puntos y cayó en los octavos de la Champions; y un gran trabajo en el Málaga, al que llevó casi a las semifinales de la máxima competición continental tras caer en cuartos en una eliminatoria épica contra el Dortmund. En Inglaterra, mientras, vivió la gloria con el City (campeón de la Premier y de dos Copas) y un periodo más discreto con el West Ham (10º en la pasada temporada y destituido a mitad de la actual con el equipo en la 17ª plaza, al borde del descenso).

El Betis había mantenido ya contactos con Pellegrini el verano pasado tras el adiós de Setién, cuyo buen recuerdo sigue siendo intenso en Heliópolis. Sobre todo en la dupla que dirige la entidad: el presidente Ángel Haro y el vicepresidente José Miguel López Catalán. Y es que Setién es el único técnico que ha triunfado en el club desde su llegada al poder, en septiembre de 2015. La imposibilidad el pasado verano de firmar a Pellegrini acabó provocando la llegada de Rubi. No obstante, el irregular curso con el catalán provocó que la secretaría técnica comenzara a redactar informes de entrenadores desde octubre.

El Betis, en el último mes, ha tocado a preparadores como Unai Emery o Marcelino antes de decidirse por Pellegrini. La decisión final la ha tomado la pareja dirigente, seducida por el palmarés del chileno, la buena sintonía del técnico con el proyecto verdiblanco y la unanimidad en el entorno del club acerca de su figura. Lógicamente, se trata de una contratación elevada en lo económico, aunque menos costosa que el pasado verano.

Pellegrini aterrizará en el Betis con su eterno segundo, Rubén Cousillas, y tres colaboradores más. Previamente, Haro y Catalán preguntaron a su capitán, Joaquín, por las prestaciones del chileno, quien fuera su entrenador en el Málaga de 2011 a 2013. “Pellegrini los ha dejado encantados”, comentan en la entidad bética. La nueva etapa en este siempre convulso Betis tendrá su continuidad con la contratación de un director deportivo. En este apartado, la entidad está manteniendo conversaciones con Antonio Cordón, quien coincidiera con Pellegrini en el Villarreal y ahora trabajando en la Federación de Fútbol de Ecuador. Desde la llegada de Haro y Catalán han pasado por la dirección deportiva Eduardo Macià, Miguel Torrecilla, Lorenzo Serra Ferrer y Alexis Trujillo. Cuatro desde 2015. Y siete entrenadores: Mel, Juan Merino, Poyet, Víctor Sánchez del Amo, Setién, Rubi y Alexis, en dos ocasiones.

Este nuevo Betis, que todavía no ha firmado de manera automática la permanencia en el presente curso, donde es el 14º con 38 puntos en espera de recibir hoy a Osasuna, tendrá como objetivo lograr una plaza europea la próxima temporada y conseguirlo, si es posible, jugando muy bien al fútbol. Los dirigentes entienden que la apuesta por Pellegrini satisfará estas dos demandas.