La tragedia de Aronián
El armenio cae ante Vachier-Lagrave tras omitir un golpe ganador y cometer luego un error garrafal
Levón Aronián, de 36 años, es uno de los mejores ajedrecistas del mundo durante los últimos tres lustros. Tiene la 4ª puntuación Elo más alta de la historia. El campeón, Magnus Carlsen, le teme. Pero el armenio ha fracasado en sus cinco Torneos de Candidatos desde 2007, y ahora puede quedarse fuera del sexto tras su desgracia de hoy en el desempate de cuartos de final de la Copa del Mundo en Janti Mansiisk (Rusia). Las semifinales, desde este jueves, serán Ding-Yu y Vachier-Radyábov.
La tragedia ocurrió en la segunda partida del desempate rápido (25 minutos para cada bando), tras las tablas en la primera. Aronián, con negras, exhibió un juego magnífico y una comprensión muy profunda que le dieron una posición ganadora. Sólo necesitaba ver un golpe ganador, sencillo para él, pero en lugar de ello (y a pesar de que tenía tiempo más que suficiente) capturó un peón, lo que permitió que Vachier-Lagrave trajera su dama a la defensa del rey. Pero lo peor vino pocas jugadas después: en una posición con pequeña ventaja para él, y difícil de manejar para el francés con poco tiempo, el armenio se dejó capturar su caballo, gratis total.
Entrar en semifinales, contra el azerbaiyano Teimur Radyábov, hubiera situado a Aronián muy cerca del Torneo de Candidatos: los dos finalistas de la Copa del Mundo ganan una plaza directa, y el 3º será un firme aspirante a recibir el puesto que la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) adjudica por designación directa. Por el contrario, esta derrota obligará a Aronián a ganar el Gran Suizo de la FIDE dentro de un mes en la Isla de Man (Reino Unido) porque todos los demás caminos al Candidatos -que se celebrará probablemente en marzo en Yekaterimburgo (Rusia)- están ya vedados para él.
Aunque nunca lo ha admitido, hay serias y repetidas razones para pensar que su problema es psicológico: no soporta bien la enorme presión de su país, donde al ajedrez es más popular que el fútbol; y él, un héroe nacional. El anterior presidente de Armenia, Serzh Sargsián, presidía también la Federación Armenia de Ajedrez, seguía las partidas en directo por Internet desde su despacho y era frecuente verlo en Olimpiadas de Ajedrez o Campeonatos del Mundo animando personalmente a sus jugadores. Personas allegadas a Aronián, que piden el anonimato, añaden a ello otra presión: la de su familia, que suele acompañarlo a los Torneos de Candidatos.
Aronián ha llegado a ser el 2º del mundo, en 2014, con 2.835,5 puntos Elo que le sitúan como 4º mejor de la historia, tras Carlsen, Kaspárov y Caruana. Y se ha mantenido en la élite desde 2005, además de ser uno de los jugadores más respetados y temidos por sus colegas. No tiene ningún problema psicológico visible: es jovial, bien educado, muy culto, puede conversar fluidamente en varios idiomas sobre una gran variedad de temas y considera que San Sebastián, donde pasa largas temporadas, es la mejor ciudad del mundo para vivir. Pero siempre tropieza en la misma piedra: 7º de 8 en el Candidatos de 2007; eliminado en cuartos de final en 2011; 4º de 8º en 2013; 5º de 8 en 2016; y 8º de 8 en 2018.
El otro desempate de hoy también ha sido dramático, pero no trágico. El ruso Nikita Vitiugov, en gran forma, autor de varias de las mejores partidas de esta Copa del Mundo, pero que no había ganado nunca a Yangyi Yu en las nueve anteriores entre ambos, cayó en la primera de la segunda tanda (diez minutos por bando) tras dos empates en las primeras. Pero fue capaz de remontar en la siguiente -y de paso, sacarse por fin la espina de su bestia negra-, a lo que siguieron otros dos empates a cinco minutos.
Y así se llegó a la muerte súbita, que en ajedrez se llama Armagedón: una sola partida de cinco minutos para las blancas, obligadas a ganar, y cuatro para las negras. El chino, con blancas, tiró la casa por la ventana en la apertura, y quedó objetivamente perdido. Mas el ruso fue cediendo su ventaja poco a poco, hasta que cometió un error garrafal que le dejó al borde del abismo. Y Yu lo apuntilló sin piedad.
Las semifinales, de jueves a sábado (el domingo será día de descanso antes de la final, que se jugará al mejor de cuatro partidas), tienen como favoritos a Ding y Vachier-Lagrave. Pero este formato de eliminatorias tan cortas es muy peculiar, y potencia el valor de la resistencia física y la fortaleza psicológica. Lo que significa que las victorias eventuales de Yu o Radyábov serían sorpresas solo relativas.
Las semifinales se retransmitirán en directo, con comentarios de Leontxo García y el GM Elizbar Ubilava, a partir de las 15.00 (hora de Janti Mansiisk), 12.00 en Madrid, 07.00 en Buenos Aires, 05.00 en Bogotá y Ciudad de México.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.