Un sorteo de Champions con muchas amenazas

El aroma futbolístico completa su regreso con la puesta de largo de la Liga de Campeones, que este jueves escenifica el sorteo de su fase de grupos. Será en Mónaco (18.00, GOL/Movistar) y con una previsión complicada para los representantes españoles, que hace un año tenían hasta tres representantes entre los cabezas de serie. En esta edición solo parte con ese cartel el Barcelona. Así, Real Madrid, Atlético de Madrid y Valencia pueden cruzarse desde los albores de la competición con rivales de hierro, al menos contra un equipo que viene de ser campeón, bien de liga, bien de competición europea.

El formato es idéntico al que se estrenó en la pasada campaña: privilegia la presencia de los representantes de las grandes ligas y aplica más tamices en una fase previa que apenas premia a seis de sus 53 participantes. El martes la superaron Olympiacos, Dinamo Zagreb y Estrella Roja; este miércoles lo hicieron Ajax, Brujas y Slavia de Praga. Esos filtros también se emplean en la confección de los cabezas de serie del sorteo porque los coeficientes de los resultados de las cinco últimas temporadas tienen menos valor que haber levantado un trofeo de campeón en el curso precedente. Por eso el Real Madrid, lider continental en ese ranking, cae al segundo bombo. Repiten en el primero los cinco campeones de las grandes ligas, los mismos que la campaña anterior: Barcelona, Manchester City, Bayern, París Saint Germain y Juventus. Se integran los dos ganadores vigentes de competición europea, Liverpool y Chelsea. Y completa el grupo de ocho privilegiados el campeón ruso, el Zenit, premio a los buenos resultados continentales de los equipos de una liga que se ha situado como sexta en la clasificación de las asociaciones que integran la UEFA.

Los campeones de liga, en minoría

La presencia de madridistas y atléticos en el segundo bombo matiza un sorteo repleto de cocos. El último finalista, el Tottenham, está también ahí, igual que el sorprendente Ajax del curso pasado, que certificó su pase este miércoles. En el tercero aguardan Valencia, Inter de Milán o Bayer Leverkusen, y conviene considerar que hace dos años partieron desde esa posición dos de los semifinalistas (Roma y Liverpool) y que en la última edición volvió a ocurrir lo mismo con el cuadro de Anfield, a la postre campeón, y el Ajax. La exigencia se completa cuando se aprecia que ligas como la francesa y la italiana tendrán equipos (Lille y Atalanta) en el cuarto bombo, que se supone el más débil.

Estamos ante una Liga de Campeones que alberga la paradoja de que los campeones de liga son minoría (15 contra 17). En todo caso, una competición de clásicos. Apenas Chelsea y Zenit de San Petersburgo reaparecen entre los integrantes de los dos primeros bombos de un sorteo que, sin embargo, echará de menos a algunos habituales.

El Oporto, que no faltaba a su cita con la Champions desde el año 2011, y PSV Eindhoven cayeron durante este verano en la fase previa. También faltan respecto al último curso Manchester United, Roma, Schalke 04, Mónaco o CSKA de Moscú, otrora asiduos que no lograron clasificarse en sus campeonatos domésticos. Tampoco el Arsenal, que siempre estuvo en liza entre 1998 y 2017 y ahora con esta suma su tercera ausencia consecutiva.

El sorteo determinará los caminos para los equipos de LaLiga. Pasarán a octavos de final los dos primeros de los ocho grupos que se conformarán esta tarde en Montecarlo. Para el Barcelona todo se allanaría si el sorteo le aleja del Inter de Milán o del Bayer Leverkusen como rivales del tercer bombo. A los equipos madrileños les resulta apetecible un grupo encabezado por el Zenit, también al Valencia, que ya en la cuadratura del círculo saldría bien parado si elude cruces con Borussia, Nápoles o Tottenham, los rivales más crudos que le aguardan en el segundo bombo.

El sorteo fijará los primeros emparejamientos para los días 17 y 18 de septiembre. La primera fase acabará en diciembre y las eliminatorias de octavos de final comenzarán el 18 de febrero. La final regresa a Estambul, al Estadio Atatürk, totémico escenario para el Liverpool, que en 2005 alzó allí la Orejona tras una memorable remontada al Milan. Ahora parte como defensor del título.