El Barcelona reedita la final clásica

La Liga Endesa se resolverá al estilo clásico. Real Madrid y Barcelona se han repartido 52 de las 62 Ligas disputadas hasta la fecha (34 para los blancos y 18 para los azulgrana), han copado 25 finales del torneo (26 con esta) y, tras dos años de crisis en el Palau, vuelven a retomar su pulso interminable por el título. El sábado en el WiZink Center comienza la batalla al mejor de cinco asaltos con ventaja de campo para los de Laso.

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El Barça, que entre 2007 y 2016 alcanzó 10 finales consecutivas (récord en la era ACB) con cuatro títulos, vuelve a retomar la senda. Otro paso en la reconstrucción competitiva emprendida por Pesic con la conquista de la Copa de 2018. En temporada y media, el serbio ha logrado recuperar el oremus perdido tras la salida de Xavi Pascual y rebajar el impulso del Madrid con seis triunfos en los últimos ocho duelos directos (cuatro en los cinco choques de esta temporada).

El meritorio Zaragoza de Porfirio Fisac no pudo estirar la intriga. Con Ribas, Singleton y Tomic tensando la cuerda desde el inicio, el Barça contuvo el espíritu de rebeldía local. Okoye y Seibutis respondieron al reto y sostuvieron al cuadro rojillo en el primer acto. Sin embargo, con el paso de los minutos, los visitantes se volvieron inabarcables (23-36, m. 15).

Recuperaba Fisac a McCalebb, pero ni el base tuvo influencia sobre el juego ni el Zaragoza encontró el punto de firmeza del segundo partido. Tan solo el arrebato de Justiz (14 puntos en la primera mitad, 8 en el segundo cuarto) concedió un respiro a la parroquia del Príncipe Felipe. Pero entonces emergió Kuric para mantener las distancias (37-50, m. 20).

En la reanudación, los locales volvieron a la carga con más orgullo que juego y desataron el ¡sí se puede! en las gradas con un mínimo acercamiento, del 43-63 al 58-68 antes de encarar la recta de meta. Pero la batería del Barça dirigida por Heurtel rebajó los sueños de remontada del Zaragoza. Tres triples seguidos del francés en un minuto, cuando la renta culé había bajado a nueve, acabaron con cualquier dilema competitivo (del 63-72 al 65-81 a siete minutos del final). Hasta ahí llegó la histórica temporada del conjunto de Fisac. Mientras, el Barça se cita de nuevo con su enemigo íntimo en una final que promete recuperar toda la emoción que no han tenido los playoffs (5-0 para los dos grandes).