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McIlroy quiere sentarse a la mesa de Tiger

El norirlandés parte como favorito en el Masters de Augusta y Woods se declara listo para ganar su quinta chaqueta verde

Juan Morenilla
Tiger, este miércoles en Augusta.
Tiger, este miércoles en Augusta.ERIK S. LESSER (EFE)

Ya no está Dan Jenkins. Y sin el histórico periodista, el Masters no es lo mismo. La figura del veterano cronista estadounidense sirvió como hilo conductor para cuantos jugadores, aficionados y reporteros han pasado por Augusta desde que cubrió por primera vez el torneo en 1951. Su reciente muerte, después de dictar cátedra en 234 grandes y 67 Masters, es otro símbolo del final de una época. Jenkins escribió sobre todos los maestros, desde su admirado Ben Hogan hasta Nicklaus, Seve y Tiger, y quizás solo le quedó una última cosa por ver. Si el grandioso Woods es capaz de volver a ganar un grande en lo que sería uno de los regresos más increíbles en la historia del deporte.

Tiger tiene 43 años. Ha pasado ocho veces por el quirófano, cuatro para operarse de la espalda y cuatro de la rodilla izquierda. Admite que no puede entrenarse como antes, ni practicar todas las partes de su juego en un mismo día porque le duele la columna. Este curso se perdió un torneo por una lesión de cuello. También sabe que en Augusta no es el pegador de antes. Y no gana un grande desde hace 11 años. Para cualquier otro atleta serían las señales de un golfista en declive. Más para uno que lo ha ganado todo. Pero es Tiger Woods. Una insaciable hambre de victoria late todavía en un hombre que el domingo por la tarde apuraba los últimos rayos de sol para entrenarse para este Masters que comienza este jueves (Movistar Golf, de 20.00 a 1.30). Su obsesión, el torneo en el que lleva pensando desde octubre, imaginando en cada torneo que jugaba los golpes que necesitará para vestir su quinta chaqueta verde. “Aquí siento que puedo ganar. Después de conseguir mi 14º grande [el US Open de 2008], pensaba que podía lograr muchos más, pero no lo hice. Ojalá pueda ahora”, dice Tiger, compañero de Jon Rahm en las dos primeras rondas. “Todavía intento ser mejor y ganar más. Me he demostrado a mí mismo que puedo volver a hacerlo”, añade el número 12 mundial.

Gary Player, el torero Rahm y la clave del putt

“¡Compadre!”, saluda Gary Player con su enorme vitalidad a los 83 años. El sudafricano destaca las “grandes piernas” de Rahm para jugar al golf, y le compara con un torero, “como los españoles”, al que pide calma para triunfar. También analiza: “Dicen que la clave en el Masters es pegarle fuerte, pero no. Lo más importante en el golf es la mente y el putt. Si estás bien en el juego corto, eso te da confianza para todo”.

El año pasado, Tiger mostró al mundo su regreso al golf competitivo. Ganó su primer torneo en cinco años, el Tour Championship, y rozó la gloria en los dos últimos grandes del curso: sexto en el Open Británico, donde fue líder a falta de los últimos nueve hoyos, y segundo en el PGA. Este curso quiere la presa mayor. “Estoy donde necesitaba estar en abril. Siento que he mejorado mucho en los últimos 12, 14 meses, y he probado que puedo jugar a ese nivel. Vuelvo a ser un jugador que puede ganar torneos”, reta el Tigre.

Woods tiene una biblioteca en la cabeza sobre cómo jugar Augusta. Era un adolescente que machacaba a preguntas a Seve y Olazabal en cada ronda de prácticas y desde entonces ha jugado 21 Masters (13 top ten) y ha vestido cuatro veces de verde (1997, 2001, 2002 y 2005), dos menos que Nicklaus. Es también el único en activo del olimpo de cinco golfistas que han ganado los cuatro grandes —junto a Gene Sarazen, Ben Hogan, Gary Player y Nicklaus—.

A esa mesa quiere sentarse Rory McIlroy, señalado como favorito y seguramente el jugador más en forma este curso. Siete top ten en el circuito americano y una victoria en el Players han lanzado al norirlandés, de 29 años, hacia un Masters que se le resiste después de conquistar los otros tres grandes. Son ya cinco veces entre los 10 mejores en 10 participaciones, y ahora puede que llegue su momento después de un reseteo mental. McIlroy ha echado mano de la meditación y de la preparación psicológica para no obsesionarse con el resultado inmediato. Ha cambiado de actitud y con ello ha brotado su mejor golf.

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El número tres mundial disfruta además con la creatividad que permite un campo como Augusta en un torneo que por el contrario no es últimamente muy dado a las sorpresas. El Masters suele respetar la jerarquía de la clasificación mundial, por mucho que los últimos cuatro maestros (Spieth, Willett, Sergio García y Reed) fueran primerizos en ganar un grande. El Niño quiere recobrar viejas sensaciones en Augusta después de no pasar el corte en los últimos cinco grandes, desde el Británico de 2017, su peor racha, y de firmar el año pasado el peor hoyo en la historia del Masters, esos 13 golpes en el 15. “Pero no siento revancha, solo ganas de hacerlo bien”, afirma el castellonense, de 39 años.

Augusta se presenta con un hoyo cinco 40 yardas más largo, un obstáculo aún más duro que antes, y previsión de lluvia desde el viernes. Comienza la batalla.

Horarios de la primera jornada del Masters de Augusta (seis horas más en España).

Algunos partidos (horario español): 15.58: Sergio García con Tony Finau y Henrik Stenson. 17.04: Jon Rahm con Tiger Woods y Haotong Li. 17.15: Rory McIlroy con Rickie Fowler y Cameron Smith. 17.59: José María Olazabal con Kevin Na y Thorbjorn Olesen. 19.16: Rafael Cabrera Bello con Francesco Molinari y Tyrrell Hatton. Televisión: Movistar Golf, de 20.00 a 1.30.

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Sobre la firma

Juan Morenilla
Es redactor en la sección de Deportes. Estudió Comunicación Audiovisual. Trabajó en la delegación de EL PAÍS en Valencia entre 2000 y 2007. Desde entonces, en Madrid. Además de Deportes, también ha trabajado en la edición de América de EL PAÍS.

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