“¡Por favor, que a Leo no le pase nada!”
El vestuario azulgrana muestra su preocupación por Messi de cara a la Copa Rey ante el Real Madrid
Y de repente se silenció el Camp Nou. No fue cuando Gameiro abrió el marcador, ni tampoco cuando Parejo, de penalti, selló el 0-2 desde los 11 metros. La hinchada del Barcelona se quedó muda cuando Messi se estiró en el lateral del campo, atendido por los servicios médicos del club, que le masajeaban el muslo de la pierna derecha, después de un choque con Lato. No es nuevo ese silencio. Una angustia inevitable cada vez que el 10 se duele. Messi volvió al campo. Ya nada fue lo mismo. En cualquier caso, ya había hecho su trabajo: dos goles para rescatar al Barcelona. Ya suma 21 redes y 10 asistencias en LaLiga.
Después de una semana de puro festejo —remontada ante el Sevilla en la Copa del Rey (6-1) y presentación del último espectáculo del Cirque du Soleil basado en su vida—, Messi arrancó apagado ante el Valencia. Pero apareció con un doblete (el 115º que marca en LaLiga) para rescatar al Barcelona. Buscó la remontada, pero ya no estaba fino. “No le achaco a la situación de Messi que no pudimos ganar el partido”, analizó Ernesto Valverde. Y enseguida comentó el estado de forma del 10. “Él está bien. No sé qué tiene, me gustaría ser claro, pero no lo sé… Tiene una pequeña molestia, no sabemos el alcance. Ya veremos mañana, que se le harán más pruebas”, añadió el entrenador del Barcelona. Si bien, minutos después el club matizó que no se le realizaría ninguna prueba esta domingo, día de descanso para los jugadores, y restó importancia a las dolencias del 10.
“Creo que no es nada grave”, dijo Aleñá. La reflexión del canterano pareció más una expresión de deseo. “¡Por favor, que no le pase nada! Ha podido seguir todo el partido”, completó Aleñá. “Es una pena que estaba tocado. Es el jugador más importante, esperemos que no pare nunca”, sumó Rakitic.
“Si Leo me hubiese pedido el cambio lo hubiese hecho. Es nuestro jugador más importante y no tengo por costumbre cambiarlo si él no me lo pide”, aseguró Valverde. Aunque el 10 finalizó el duelo, su situación no parece muy alentadora. Según avanzó Catalunya Ràdio, Messi tiene una pequeña contractura en el muslo de la pierna derecha y es duda para el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey ante el Real Madrid, que se jugará el próximo miércoles en el Camp Nou. “Si Leo está bien, jugará”, subrayó el preparador azulgrana, que esperará al próximo entrenamiento, el lunes, para conocer el estado del argentino. El Barcelona, en cualquier caso, le ganó al conjunto blanco sin Messi el último clásico (5-1); tenía una lesión en el codo derecho. En cualquier caso, eran tiempos diferentes en Chamartín. Entonces, mandaba Julen Lopetegui en el banquillo del Madrid.
“Todos los partidos son diferentes. Ya veremos, en aquel encuentro los jugadores que tenían disponibles eran otros”, puntualizó el técnico azulgrana. Messi no fue el único jugador del Barcelona que se marchó con molestias del Camp Nou. “Algunos jugadores terminaron tocados, esperemos que lo de Leo y Gerard [Piqué] no sea nada. Hay partidos interesantes”, explicó Rakitic. El vestuario azulgrana se marchó preocupado por la situación de Messi, enrabietado por el empate ante el Valencia. “Nos quedamos cortos porque queríamos darle la vuelta. La primera media hora no fue la mejor, pero después fuimos superiores. A veces, parece que jugamos al balonmano alrededor del área del rival”, analizó Rakitic.
La desilusión del Valencia
“Jugando como hoy ganaremos muchos partidos”, sostuvo Marcelino. “Siempre que vas ganando 0-2 y acabas empatando, te quedas un poco desilusionado. Pero no nos lo merecemos”, completó el preparador del conjunto che. Un análisis con el que no coincidió Valverde. “Fue una primera parte extraña porque ellos empezaron muy bien, pero después nosotros dominamos el partido”, comentó el Txingurri. “Nos hicieron los goles cuando mejor estábamos nosotros. No estábamos pasando apuros. Pensábamos que íbamos a lograr la remontada, sobre todo porque los estábamos encerrando en el área. En el 2-2 ellos se cerraron muy cerca del área y teníamos que estar muy certeros. Era difícil. Hemos luchado, pero al final no pudo ser”, concluyó el entrenador del Barcelona.
El Barça tiene al Madrid a la vista y ruega por Messi.
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