Griezmann: “La culpa de lo del Qarabag fue mía”

La victoria del Atlético enseñó a un Simeone orgulloso de su planteamiento y preocupado por las molestias musculares de Giménez y Diego Costa. “Los médicos les informarán mejor cuando les hagan las pruebas, pero se perderán los próximos partidos. Son muchos los encuentros, el esfuerzo es enorme, esperamos que los chicos que esperan su oportunidad la puedan aprovechar y muestren lo que valen”, aseguró el Cholo.

Al parecer, se presentan tiempos para Kalinić si su entrenador opta por lo que sería el recambio natural de Diego Costa. Aunque también ha probado en amistosos y en algunos minutos de partidos oficiales a con Correa, Lemar y Gelson Martins como segundos delanteros. Simeone explicó su cambio de dibujo apoyado en los análisis del Brujas. Aunque el equipo no estuvo cómodo, el técnico no lo reconoció.

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“Habíamos estudiado al Brujas, ese dibujo nos dio la posibilidad de ponernos en ventaja, que es lo que queríamos. Después, vimos un gran gol de ellos, ya avisé de la potencia de disparo de Groeneveld. La lesión de Giménez nos generó pasar al 4-2-3-1, con Filipe y cuando el equipo se pudo liberar metimos a Correa, que fue determinante, nos dio desequilibrio para poder generarle más peligro al Brujas. Todo eso llegó a partir de que el fútbol son 90 minutos”.

El Cholo no dudó en señalar a Griezmann como el mejor jugador del mundo, aunque detesta la frase “comer en la mesa de Cristiano y Messi”. “Griezmann, fue el mejor jugador del mundo la temporada pasada porque ganó el Mundial, que no lo ganan muchos jugadores”, aseguró en lo que pareció una puya a Cristiano Ronaldo y a Messi. “Además del Mundial ganó la Liga Europa, fue segundo en una Liga en la que compite con Madrid y Barça y también se llevó la Supercopa. Eligió quedarse en el Atlético y eso ha tenido consecuencias para sus compañeros, para el club y para él, que está atravesando uno de los mejores momentos de su carrera”.

De alguna manera, esta victoria ha alejado el fantasma del Qarabag, el verdugo que sonrojó al Atlético en la edición pasada en dos partidos para olvidar. Relajado, Griezmann, volvió a cargar por segunda vez esta semana con las culpas de aquella dolorosa eliminación en la primera fase. “Fue culpa mía porque mentalmente no estaba bien y no pude ayudar al equipo”, dijo el francés, que también explicó que la charla de Simeone en el descanso les ayudó a cambiar el partido: “Utilizó las palabras adecuadas”. “Les dije que había que manejar la ansiedad porque nos faltaba claridad en ataque. La entrada de Filipe y Correa nos dio lo que necesitábamos”, apostilló Simeone.