Boris Becker: “Si fuiste un campeón, siempre serás un campeón”
El alemán, ganador de seis grandes y exnúmero uno, llevó las riendas de Djokovic durante tres años y ahora es analista en Eurosport. Habla del tenis de ayer y hoy, y cree que a los jóvenes les falta deseo
Después de broncearse unos días en Ibiza, destino habitual de sus veranos, Boris Becker (Leimen, Alemania; 50 años) puso rumbo a Nueva York. Y antes de que arranque el US Open, evento que él ganó en 1989, el tótem del tenis alemán masculino hace un paréntesis en su agitada agenda y responde a una reducida selección de periódicos internacionales, entre ellos EL PAÍS. En los próximos días diseccionará el torneo neoyorquino para el canal Eurosport, que ofrecerá más de 250 horas de cobertura y lo emitirá en exclusiva hasta 2022.
Pregunta. Se retiró hace ya casi 20 años, en 1999. ¿Cómo ha evolucionado el tenis desde entonces?
Respuesta. En realidad, creo que no ha cambiado demasiado. El de los ochenta y los noventa era muy competitivo, había fantásticos jugadores. Quizá los Grand Slams eran un poco más abiertos que ahora, porque si observas los últimos 12 años solo un puñado de tenistas los han ganado. Cuando yo empecé el número uno era McEnroe y también estaba Lendl, y hoy día están Nadal o Federer. En mis días estaba todo más abierto. Estos días se juega más desde la línea de fondo y en mi época íbamos más a la red, pero pienso que tanto el tenis de ahora como el de entonces son buenos. Ayer y hoy ha sido igual de difícil: tú quieres ser el mejor, pero hay miles de rivales que también quieren serlo.
P. Participó en 10 ediciones del US Open y ganó la del 89, contra Ivan Lendl. ¿Cuáles son sus recuerdos de Nueva York?
R. Podría destacar muchos momentos de este torneo, pero lo que más me marcó fue el ataque terrorista del 11 de septiembre, en 2001; fue justo dos días después de la final entre Agassi y Hewitt. Al margen de esto, me encantan las sesiones de noche, porque sacan lo mejor de los jugadores y deparan partidos increíbles.
En mi época subíamos más a la red, pero tanto el tenis de ahora como el de antes son buenos
P. ¿Qué tiene de especial jugar a esas horas?
R. Jugar en Nueva York al tenis es diferente. Borg, por ejemplo, nunca ganó el torneo. Y luego está lo que hacía McEnroe en la pista o lo que sigue haciendo Federer, al que yo le llamo Comandante No Oficial del torneo, porque lo suyo es sencillamente fenomenal. Y también está Nadal, por detrás de él, pero no muy lejos. Este evento ofrece noches fantásticas.
P. Lo característico en la grada es el ruido de los espectadores, que se mueven todo el rato, hablan y gritan, a diferencia de los otros grandes. ¿Cómo afecta esto al tenista?
R. Es muy difícil. Tienes que llevar tu concentración al límite porque te puedes despistar rápidamente. Es fácil frustrarse y sentirse molesto por todo lo que te rodea, pero es parte de esto y solo puedes aceptarlo.
P. Después de más de un año, el Big Four coincide otra vez en un grande. ¿Quién es el favorito?
R. ¿A quién consideramos dentro del Big Four [Federer, Nadal, Djokovic y Murray] ahora? Deberíamos llamarlo de otro modo. Para mí el máximo favorito es Nadal, porque su temporada ha sido increíble y es el número uno. Ganó en Montreal hace poco y está en un estado de forma espectacular. Tras él diría que está Djokovic: ganó Wimbledon y eso es muy remarcable. Y a continuación está Federer, al que los aficionados de Nueva York adoran, pero debemos ver cómo gestiona ahora un torneo largo como este. También mencionaría a Zverev y Del Potro, porque este último que ya sabe qué es ganar aquí.
P. Entrenó a Djokovic tres años exitosos. Después de los dos últimos cursos de dificultades, ¿Econfiaba en el regreso triunfal de Londres?
R. Una vez que fuiste un campeón, siempre serás un campeón. Él tiene la mentalidad del campeón. Obviamente necesitaba tiempo, jugar partidos, y me alegro de que esté de nuevo con su viejo equipo, porque eso le dará más confianza. Novak es un campeón, así que para mí era una cuestión de tiempo. Si empleas las horas suficientes en la pista de entrenamiento, juegas torneos y concentras tu mente en el tenis, vuelves. Y él, ciertamente, lo ha hecho.
Djokovic necesitaba tiempo y jugar partidos. Él y yo somos similares: jugamos para ganar
P. ¿Le gustaría volver a ser su técnico?
R. No, mi capítulo como entrenador está cerrado, pero estamos muy cerca. Somos amigos y hablamos de tenis. Cuando estoy en un torneo él me pregunta cosas y quiere escuchar mi opinión, pero ahora está en buenas manos. Tiene 31 años y sabe qué necesita, y tiene alrededor a gente que entiende esto. Es una buena situación para él.
P. ¿Todavía tienen química?
R. Él y yo jugamos de forma diferente, pero tenemos una mentalidad similar. Todo esto va de ganar y de saber encontrar el camino para ganar, dejándolo todo en la pista. En ese sentido somos parecidos, los dos jugamos siempre para ganar.
P. ¿Y no se plantea un retorno a los banquillos para impulsar a otro jugador?
R. Estoy bastante feliz donde estoy ahora, trabajando como comentarista y para la Federación Alemana, así que de alguna manera sigo siendo un entrenador porque superviso a nuestros tenistas, aunque no lo haga a diario o semanalmente.
P. ¿Cree que a los jóvenes les falta esa mentalidad de la que habla?
R. De alguna forma, sí. Hay muchos chicos con talento, pero por alguna razón todavía no han tenido éxito en los Grand Slams. Hay algo de ellos, de su mentalidad y de su concentración, que por ahora no funciona en torneos de dos semanas, eso es obvio. Tienen el talento, la calidad y son lo suficientemente buenos, pero algo les frena. No sé exactamente lo que es, pero hay un problema.
Los jóvenes de hoy tienen el talento, pero hay un problema: algo les frena”
P. Su compatriota Zverev es el gran señalado. ¿Hasta dónde puede llegar?
R. Después de Nadal y Federer todo será más difícil. Será complicado tener el éxito que han tenido estas dos leyendas. Siempre he pensado que él puede dominar en los próximos años, pero ganar 20 ó 17 majors… Es increíble. No creo que alguna vez se pueda duplicar lo que han hecho ellos. Habrá tiempo para que Zverev gane, o para Kyrgios cuando juegue mejor; y luego están Tsitsipas y los rusos, Khachanov, Rublev… Que ganen su primer grande es solo una cuestión de tiempo.
P. Hablando de las chicas, los siete últimos grandes los han ganado jugadoras diferentes. ¿Qué le dice eso?
R. Es interesante, puede tener una doble lectura. Por una parte dice que el circuito femenino es muy sorprendente y por otra que a las top les falta consistencia. Esto genera interés, porque nunca sabes quién va a ganar.
P. ¿Por quién apostaría esta vez?
R. No hay una favorita. Halep y Kerber están jugando bien desde hace años, y no hay que olvidarse de Serena Williams, a la que nunca se debe subestimar. Ella va a estar muy motivada porque Flushing Meadows es su segunda casa y los newyorkers la apoyarán mucho, como siempre.
BECKER, DENTRO DE UN EQUIPO DE LUJO
El alemán será una de las voces del major estadounidense (del 27 de agosto al 9 de septiembre) en esta edición, para la que Eurosport ha configurado un equipo de lujo de comentaristas. Para la edición internacional cuenta con Becker, John McEnroe y Mats Wilander, y a nivel nacional los elegidos son otros tres exjugadores: Alex Corretja, Conchita Martínez y Jordi Arrese.
Eurosport, La Casa del Tenis, emitirá en exclusiva el torneo de Flushing Meadows hasta 2022 (excluyendo a Reino Unido e Irlanda) y además cuenta con los derechos de emisión del Open de Australia y Roland Garros en más de 50 países de Europa, así como los de Wimbledon en 34 países continentales. El curso pasado incrementó su audiencia en un 63% con respecto al anterior y además de sus canales ofrece el formato online de Eurosport Player.
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