España camina hacia el Mundial

La última estación es Moscú, sede de la final del Mundial de fútbol que comienza el próximo 14 de junio en Rusia. El viaje es incierto pero son muy pocos los peregrinos que van tan armados como España. La selección, gran favorita junto con Alemania y Brasil, dio el primer paso ayer, concentrándose en la residencia de Las Rozas. Se trata de un grupo provisional de futbolistas, a la espera del relevo que se producirá cuando se vayan incorporando los que ganaron la Decimotercera Champions con el Madrid.

El pálido Iniesta, el curtido Busquets, el dinámico Piqué, el barbudo Costa —intimidante en el campo y cariñoso fuera—, y el moreno Thiago Alcántara, serio como un gendarme, desfilaron encabezando la marcha, vestidos de civil, listos para tomar la merienda, ponerse el uniforme y calzarse las botas. Las primeras botas, la primera camiseta, el primer ritual de preparación antes de saltar al primer entrenamiento de una larga serie que todos esperan prolongar otros 49 días. Hasta el 15 de julio en el estadio Luzhniki.

Julen Lopetegui, el seleccionador, no puede vivir sin proyectar. El plan de acometida ha sido meticulosamente diseñado para evitar sobresaltos. Ni siquiera la lesión de Dani Carvajal se ha traducido en una gran alteración. El lateral derecho, que sufrió una rotura de grado dos en el músculo semitendinoso de su pierna derecha durante la final de Kiev, el sábado pasado, es tan importante para el juego de la selección que su inevitable baja durante tres semanas no le ha dejado fuera de la llamada. Al contrario. Lopetegui y los médicos de la federación le han invitado a recuperarse con el equipo mientras sus colegas madridistas se cogen unas pequeñas vacaciones.

Ramos, Lucas, Nacho, Asensio e Isco tienen licencia. Carvajal no. Enfundado en un par de vaqueros raídos, el hombre del sur de Madrid se presentó en Las Rozas aliviado después de un fin de semana de sobresaltos. Dijo que cuando sintió la punzada en la parte posterior del muslo se temió lo peor. Creyó que se perdería otra fase final con la selección absoluta y le dolió en el alma porque es una experiencia que todavía no ha disfrutado a pesar de ser titular de La Roja desde 2015. Los médicos le animaron a intentar recuperarse, bajo el argumento de que el músculo semitendinoso cicatriza con facilidad.

Lopetegui llamó a un pelotón de reservas en sustitución de los madridistas que disputaron la final de Kiev. Entre los hombres de repuesto estaba Jesús Vallejo, suplente del Madrid, un valencianista de gran proyección, Carlos Soler, el flamante mediocentro del Atlético, Rodri, y cuatro vascos, Williams, Yeray, Oyarzabal y Unai Núñez. En principio, los siete se quedarán hasta el fin de semana. El 4 de junio la FIFA obliga a inscribir la lista definitiva. El día 7 la expedición se embarcará rumbo al Cáucaso, hacia la ciudad de Krasnodar, sede de la concentración definitiva.

Los jugadores estiraron las piernas antes de cenar. Sobre una cancha empapada. El aguacero bañó el ejercicio. Lopetegui fue el primero en saltar al césped, acompañado de Koke, Costa y Busquets. Había unas 200 personas, la mayoría niños, jaleando a los futbolistas. Chillaron a todo pulmón cuando vieron aparecer las calvas de Iniesta y Silva y no bajaron los decibelios al ver a Saúl. El coro fue tan generoso que incluso aplaudió a Piqué y le cantó al entrenador.

Amistoso en Vila-real

La práctica duró una hora y consistió en rondos y juegos en campo reducido. Fue un suave punto de partida de una semana que constará de cuatro jornadas de trabajo hasta el viernes, un entrenamiento ligero en Vila-real el próximo sábado en el Estadio de la Cerámica, y un partido amistoso contra Suiza el domingo.

Lopetegui procura distender las horas de espera. El ténico permitirá a los futbolistas cenar y dormir fuera de la residencia hasta el viernes, día del viaje a Vila-real. El equipo, que se reagrupará el lunes en Las Rozas, prevé dedicar dos jornadas de entrenamientos concentrados el martes y el miércoles de la semana que viene antes de viajar a Rusia. Una vez instalada en Krasnodar, el sábado 9 de junio, la selección se ha citado con Túnez en el estadio de la localidad, junto a la ciudad deportiva donde se aloja, para disputar otro amistoso. Será el último simulacro antes del estreno mundialista contra Portugal, el 15 de junio en Sochi, en la primera fecha del Grupo B. Seguirán los partidos contra Irán en Kazán, el 20 de junio; y contra Marruecos en Kaliningrado, el 25.

Rodrigo Moreno y Thiago Alcántara fueron los últimos en abandonar el campo después de quedarse probando tiros contra Kepa. El seleccionador, entre tanto, hizo un aparte con Odriozola para dedicarle unas palabras. El lateral de la Real Sociedad es el primer candidato a ocupar la banda de Carvajal en el duelo con Portugal.