Cinco medallas para España en los Europeos de cross

Entre los mayores, el asunto es de banderas. Adel Mechaal, que termina segundo, besa la española antes de desplegarla emocionado bajo el arco de meta; los tres turcos que dieron a su país el triunfo individual y por equipos, despliegan la suya al revés, con la media luna y la estrella mirando hacia la izquierda, antes de que el comisario político, el único turco clasificado nacido en el país, no llegue rápido para darle la vuelta. Los tres primeros de su país, el campeón individual, Kaan Özbilen, Aras Kaya y Polat Arikan, nacieron en Kenia y se nacionalizaron turcos en los últimos años.

Son los Europeos de cross, en el hipódromo de Samorín (Eslovaquia) de charcos helados y césped duro, y España ha ganado cinco medallas. Dos, ambas de plata, las consiguen los atletas senior, que terminaron segundos por equipos (gracias a los buenos puestos de Daniel Mateo, octavo, y Ayad Lamdassen, décimo, junto al segundo de Mechaal). Otras dos son de bronce, las del equipo júnior (o sub 20, nueva denominación) femenino (Marta García, 13ª; Lucía Rodríguez, 15ª, y Carla Gallardo, 19ª) y el relevo mixto (Solange Pereira, Víctor Ruiz, Esther Guerrero y Jesús Gómez).

La noticia más esperanzadora es el oro de los sub 20, que liga al cross español con los ancestros, con la época de Francisco Aritmendi y Mariano Haro, los años 60 y 70, cuando las carreras de campo a través eran pruebas para castellanos del campo, duros y sacrificados. Aunque ninguno de ellos llegó al podio individual, los cinco júnior españoles terminaron entre los 13 primeros de una prueba en la que se impuso por segundo año consecutivo el prodigio noruego Jakob Ingebrigtsen, el hermano pequeño del apellido más famoso del medio fondo europeo. Miguel González fue quinto, Annasse Mahboub, 7º; Ignacio Fontes, 8º; Mario García, 9º, y Tariku Novales, 13º.

Mechaal no se equivoca con la bandera española. La despliega sin errores. Nació en Marruecos en diciembre de 1990 pero vive en España desde antes de cumplir los dos años, desde que su padre emigró para trabajar en las obras de Barcelona 92. Mechaal, de gran clase y recorrido atormentado en el atletismo español, ha vivido como una epifanía 2017. Ha sido el año en el que, perseguido por una sanción por tres controles antidopaje en los que no apareció, dejó Palamós para irse a vivir y entrenar a Madrid. En un estado similar al de libertad provisional, corrió y ganó en Belgrado los 3.000 metros del Europeo en pista cubierta y proclamo su españolidad y su fe en España. Ya liberado por el TAS (Tribunal Arbitral del deporte), de la sanción, quedó cuarto y frustrado en los 1.500m del Mundial de Londres. En Samorín corre con valentía hasta que se queda sin aire. Aguanta al principio el ataque de los británicos, que sucumben a su propio entusiasmo. Después a los 6.000 metros, ataca fuerte, de lejos. Solo le alcanza Özbilen, quien le deja desgastarse a su ritmo hasta que con un cambio decidido en la última vuelta, le deja atrás definitivamente.

Solo dos españoles han ganado la prueba individual senior del Europeo de cross, que se disputa desde 1994. Aelemayehu Bezabeh lo hizo dos veces, en 2009 y 2013, antes y después de cumplir una sanción por dopaje; Marta Domínguez ganó en 2007, antes de la sanción por dopaje con la que acabó su carrera.