El Toluca no logra vencer a Chivas en casa (1-1)

Era un duelo cerrado, carente de un protagonista claro hasta el minuto 80. Fue allí cuando el Toluca y las Chivas despertaron de un letargo. Todo gracias a un latigazo de Rodolfo Pizarro, mediocampista del Guadalajara, que se transformó en un gol tardío que significada medio boleto a la final. Pero los diablos no quería un final así. Dos minutos después empataron el juego con un cabezazo de Fernando Uribe, aunque no lograron sacar la victoria, un resultado más cómodo para afrontar la vuelta.

Los de Toluca no pudieron validar su juego ofensivo pese a la propuesta de Hernán Cristante, el entrenador. El gol no pudo caer en algún intento del intrépido Sambueza y tampoco de Gabriel Hauche. Para contrarrestarlo, Almeyda blindó su mediocampo con tres portentos: Michael Pérez, Orbelín y Vázquez. La delantera del Guadalajara entre Calderón, Fierro y Pulido no cuajó.

El revulsivo del juego fue Rodolfo Pizarro, quien ingresó en la segunda parte. Más de la mitad del tiempo que pasó no pudo aportar mucho hasta que empezó a robar balones, cual Robin Hood, y así cayó el tanto. Los diablos reaccionaron de inmediato y Sambueza se encargó de asistir a Uribe para el empate. En un par de chispazos le dieron otro tono a un partido gris, carente en la mayor parte del juego de la adrenalina de una semifinal.