Macri: “El fútbol argentino está en una crisis terminal”

Pocos días antes de que termine el 2016, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, confirmó una decisión que había tomado en octubre: el contrato que garantizaba la televisación gratuita de los partidos del fútbol argentino se terminaba, a pesar de que el compromiso era hasta 2019. La decisión del mandatario responde al enorme costo que el programa le demandaba al Estado, un total de 2.500 millones de pesos (casi 170 millones de dólares) por temporada. Los dirigentes de los clubes, reunidos en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), hoy en plena reestructuración, pusieron el grito en el cielo y tuvieron que salir disparados a negociar un nuevo contrato, ya con los privados. Luego, se especuló con pedirle al gobierno una prórroga por seis meses, algo que este martes fue descartado de plano por Macri.

“El estado no intervendrá en el Fútbol Para Todos”, confirmó el mandatario, y diagnosticó que “el fútbol está en una crisis terminal, peor de lo que se recibió el país”. “Los dirigentes del fútbol argentino toman atajos y no hacen las cosas seriamente. Van en busca de un parche y no se toman las cosas con la suficiente seriedad”, agregó quien alguna vez fue presidente de Boca, “Espero que tengan previsto cómo van a hacer febrero”. Hasta el momento, a las oficinas de la AFA sólo llegaron dos ofertas para televisar los partidos (una de Turner y Fox y otra de ESPN), aunque sus valores estarían muy por debajo de lo percibido hasta ahora, por lo que no llegaron a un acuerdo. Los tiempos se acortan para los dirigentes de los clubes que deben afrontar el regreso de la liga dentro de muy poco tiempo, el 5 de febrero.

Quien salió al cruce de Macri es el presidente del club Vélez Sarsfield, Raúl Gámez, un viejo rival de Julio Grondona, quien dirigió la AFA con mano de hierro durante 35 años, hasta su muerte en julio de 2014. “(Macri) es un hijo de puta, un sinvergüenza, lo que hizo con el fútbol éste tipo pedante, soberbio, basura, del presidente de los argentinos no tiene perdón de Dios, es una basura total, un tipo del que tenemos que tener mucho cuidado. Quiero que le vaya bien, en otras cosas, como en el país”, lanzó Gámez a la agencia Télam. Y agregó: “Es un cachivache total, que deje el fútbol, porque es una vergüenza la presión que está haciendo en los clubes para que seamos más pobres y él sacarse el gusto de que saquen más plata sus amigos, haciendo sociedades anónimas”.

“Lo más grave, pero lo muy grave, es lo que escuché del Presidente de todos los argentinos. Decir con una soberbia increíble, al hablar de los dirigentes que ya nos avisó hace seis meses (sobre el término del Fútbol Para Todos y el dinero que perciben los clubes), ¿Por qué no regularizó el tema de la TV, a través de la Comisión Normalizadora que él armó”, indicó el presidente de Vélez, en referencia a la actual conducción de la AFA, que tiene como presidente provisorio a Armando Pérez, luego de la doble intervención impuesta por la FIFA y la Inspección General de Justicia (IGJ). El próximo 28 de abril, siempre en caso de que se cumpla un riguroso plan de acción diseñado de común acuerdo con la FIFA, la entidad madre del fútbol argentino tendrá por fin la posibilidad de elegir un nuevo presidente en sufragio democrático. Todos esperan que no suceda el mismo escándalo que tuvo lugar el 3 de diciembre de 2015, cuando una elección con 75 sufragantes resultó en un empate en 38.