Cristiano Ronaldo pasa de promediar un gol cada 90 a uno cada 192 minutos

Dice Zinedine Zidane que Cristiano Ronaldo no está ansioso. Ni preocupado. “Acaso, enfadado, porque él siempre quiere marcar”. Dice también Zidane que Cristiano ha puesto el listón tan alto todos estos años que cada vez que no marca, parece que hay un problema. El problema, sin embargo, es que Cristiano vive esa sequía goleadora como un problema. Sus gestos de desesperación cada vez que falla un gol —como el día contra el Legia de Varsovia o contra el Athletic— le delatan.

Maldice su mala suerte y la habilidad de los porteros. Muchas veces parece estar pensando que le han echado un mal de ojo. Todos sus compañeros van a abrazarle y a darle mimos en las celebraciones. A todos le preguntan después de cada partido si ven a Cristiano ansioso y todos dicen que no.

Este sábado en Mendizorroza, el portugués (que ha alcanzado las cien asistencias, por cierto, con la camiseta del Madrid) buscará recuperar su promedio goleador. Desde que llegó al conjunto blanco en verano de 2009 nunca había marcado tan poco. En lo que va de curso lleva 4 goles (2 en Liga y 2 en Champions), 8 menos que el año pasado a estas alturas de temporada.

Su promedio es de un tanto cada 192 minutos; lejos de las cifras a la que siempre había acostumbrado. Los números dicen que, a estas alturas de temporada, en su primer año anotó un gol cada 58 minutos. Uno cada 90 en la temporada 2010-11, uno cada 93 en la siguiente, uno cada 65 en la 2012-13, uno cada 72 en la 2013-14 y uno cada 51 en la 2014-15 (ese año llevaba 19 tantos en los primeros doce partidos y terminó la temporada con 61 goles). La pasada su promedio en el arranque de curso fue un tanto cada 90 minutos