Rudi Völler: “Ahora, el balón nunca está quieto”
El director general del Bayer Leverkusen analiza al fútbol moderno, destaca a Messi y a Guardiola, y asegura que el Bayer no saldrá a defenderse frente al Barcelona
Ni siquiera trajeado puede disimular su musculado cuerpo, propio de un delantero que libró mil batallas en el área, muchas victoriosas. Escondido su característico bigote, Rudi Völler se explica desde la sala VIP de los empleados de la empresa Bayer, donde un gran ventanal da paso al jardín del BayArena. Campeón del Mundial 1990 y reconocido goleador, tanto en Alemania como en Francia e Italia, ahora es el director general del Bayer Leverkusen.
Pregunta. Como delantero y entrenador, siempre tomó las decisiones en el campo. ¿Disfruta ahora en los despachos?
Respuesta. La cosa más bella del mundo es ser futbolista. Por eso siempre les digo a los jugadores que no lo dejen demasiado pronto porque es un regalo que Dios da a muy pocos. Aunque ahora también disfruto, sobre todo si ganamos, porque es un puesto con mucha responsabilidad.
P. ¿Cree que el mejor modelo de gestión pasa por tener exfutbolistas como dirigentes, como en su caso o el del Bayern?
P. Puede ser una ventaja, pero lo importante es saber de fútbol.
R. ¿Comparte el modelo inglés de un multimillonario que da poderes al director general?
R. Aquí eso sería imposible. En Alemania no se entiende que decida una persona sino que hay una cúpula que opina e interviene en todos los asuntos importantes.
Hay jugadores alemanes muy técnicos que parecen jugar al jogo bonito, hasta el punto de que ahora es Brasil la que juega como lo hacía Alemania"
P. ¿Y hacia dónde va el fútbol?
R. Hacia donde digan los jugadores. Los entrenadores tienen el estilo y dan empuje a sus ideas, pero lo importante son los que llevan las botas. Y cada vez están más preparados.
P. ¿En qué sentido?
R. Desde hace 30 años que el fútbol se está haciendo más rápido. Los jugadores corren mucho más que yo en mi tiempo, y nosotros lo hacíamos mucho más que los de la década anterior. Ahora son máquinas con un turbo dentro y el balón nunca está quieto.
P. ¿Cómo los jugadores de la selección alemana?
R. Es que desde 2004 empezaron a surgir futbolistas alemanes con piel brasileña. Jugadores técnicos que parecen jugar al jogo bonito, hasta el punto de que ahora es Brasil la que juega como lo hacía Alemania. Götze, Müller, Reus… son tantos y tan buenos, que ganaron el Mundial. Estamos en el periodo de oro.
P. Usted llegó a tres finales, dos como jugador y una como técnico, pero se le recuerda por el episodio sufrido con Rijkaard en los octavos del Mundial del 90 con un escupitajo de por medio.
R. Él me dijo que lo sufre. El año pasado estaba en contacto con un equipo en Alemania y no firmó porque siempre está ese asunto. Fue un error, se disculpó y se acabó. Con Frank hicimos las paces. No me enfadé con él, sino con el árbitro que me expulsó y nos dejó sin un delantero.
P. ¿Esa figura, la del ariete, siempre existirá?
R. Depende. Si ganas sin uno, como hizo España y el Barça, pues dejará de necesitarse.
P. ¿Y quién es el mejor delantero centro actual?
R. El mejor del mundo es Messi. Pero si nos ceñimos a esa posición: Lewandowski, Suárez, Ibrahimovic… Aunque nosotros estamos encantados con Chicharito porque balón que le llega, balón que mete. Tiene el olfato y sabe dónde irá la pelota.
No sé si podemos ganarle porque no estamos en nuestro mejor momento, pero no sólo limitarnos a defender"
P. También les abre mercado en Estados Unidos ¿no?
R. Queremos salir al mundo; no sólo a América sino también a Asia. Aunque es difícil competir con la Premier, que cuenta con más dinero de patrocinios y derechos televisivos, y que empezó a expandirse antes que los demás.
P. ¿Cree que Pep Guardiola les ha impulsado?
R. Yo estaría contento de que se quedara más años.
P. Pero la mayoría de los rivales juegan contra ellos atrás y a la contra. ¿No hay otra manera?
R. No lo sé. El Bayern perdió esta semana por primera vez con un Moenchengladbach que en el primer tiempo pudo encajar cuatro goles. Contra ellos, como ante el Barça, es difícil atacar. Hay muchas diferencias y es lógico porque tienen grandes marcas detrás como Audi, Telecom, Adidas…
P. ¿Y qué le pasa al Bayer Leverkusen, que de los últimos siete encuentros sólo ha ganado uno?
R. Cuando no hay éxito se ven a los grandes entrenadores. Y Roger [Schmidt] tiene carácter, fuerza de combatir y asume la presión. Hay algunos que se hacen más pequeños. Él no es así; busca que salgamos de nuestro túnel.
P. ¿Eso es ganar al Barça?
R. Es prácticamente imposible. No sé si podemos ganarle porque no estamos en nuestro mejor momento como en la ida, cuando le pusimos en dificultades. Pero trataremos de hacer lo imposible y no sólo limitarnos a defender.
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