Nadal y Ferrer se citan con Murray y Wawrinka en el grupo de ‘Maestros’

A pesar de la dificultad que entrañan nombres tan sugerentes como los del escocés Andy Murray, el suizo Stanislas Wawrinka y el de su amigo David Ferrer, a buen seguro que Rafael Nadal se marchó satisfecho del City Hall de Londres. El bombo, en esta ocasión, fue amable para el de Manacor, que logró evitar en la fase de grupos de la Copa de Maestros (del 15 al 22 de noviembre) a los dos rivales más temidos, Novak Djokovic y Roger Federer, encuadrados finalmente junto al checo Tomas Berdych.

Todos ellos, las ocho mejores raquetas de 2015, asistieron de punta en blanco a la ceremonia que se celebró en la capital inglesa. Arrancó el acto con media hora de retraso, pero como compensación dejó dos píldoras: una, la confirmación de que el torneo se continuará celebrando en el O2 Arena al menos tres años más, hasta 2018; y dos, la inestimble intervención del alcalde Boris Johnson, que a base de ironía y humor consiguió que hasta el exquisito Federer no pudiera contener la risa.

Pero, bromas aparte, la mano de Johnson deparó buena fortuna a priori para Nadal. Ausente el año pasado por apendicitis, el español sorteó lo que hubiera sido un emparejamiento terrible, un encuentro directo en el round robin con Djokovic y Federer, el número uno y ganador de las tres últimas ediciones, y el hombre que más cetros maestros (seis) acumula. No obstante, tiene por delante una prueba de fuego: Murray, Wawrinka y Ferrer.

El alicantino, 33 años, es todo un clásico. Esta será su séptima presencia, la sexta consecutiva; llega además Ferrer con el aval de un año formidable, en el que ha levantado cinco títulos, pese a que arrastra una tendinopatía en el codo derecho desde julio. Estará también enfrente Wawrinka, flamante ganador de Roland Garros, verdugo de Nadal hace una semana sobre el tapiz de París-Bercy; el suizo es uno de los jugadores más en forma este curso y si su cabeza no le juega malas pasadas puede ser un firme aspirante.

Y, como cabeza de cartel del grupo, figura Murray. Existía incertidumbre en torno al escocés, puesto que cinco días después de la Copa de Maestros encarará una final histórica con Gran Bretaña en la Copa Davis (del 27 al 29, en Gante, contra Bélgica). Al final, el de Dunblane no ha renunciado y competirá en Londres con todas las garantías, en busca de su primer trofeo en el torneo. Por lo tanto, desafío de altísima exigencia para Nadal.

"No es mi mejor año, pero las dos últimas semanas he jugado bien y vuelvo a disfrutar en la pista. Estoy feliz de poder volver a Londres", expresó el balear en el turno de intervenciones, en el que, por cierto, hablaron Djokovic, Murray, Federer y él, pero no así Nishikori, Berdych y Ferrer, que se quedaron con la palabra en la boca por exigencias del reloj y para que no se postergase la ceremonia.

El domingo arranca la competición con la disputa de los dos primeros pulsos, a las 15.00 y las 21.00, hora española (Canal+ Deportes2). Ferrer, contra Murray (15.00), y Nadal, frente a Wawrinka (21.00), debutarán el lunes. La Copa de Maestros, cuyo campeón puede sumar 1.500 puntos a su ránking si concluye invicto, premia al ganador con 2.228.000 de dólares (2.060.658 euros) si este es capaz de ganar todos los partidos. Solo dos tenistas españoles han conquistado el título: Manuel Orantes (1976) y Alex Corretja (1998).