“No veas cómo juega el niño”
Los veteranos del Mallorca pronto advirtieron el fútbol de Marco Asensio, tal y como demuestra ahora en el Espanyol
En el área deportiva del Espanyol tenían claro que Marco Asensio (Palma de Mallorca; 19 años) “tiene algo distinto”. Por eso Óscar Perarnau, director deportivo blanquiazul, persiguió al futbolista hasta el final y, ya en el último día de mercado, logró la cesión del jugador, que pertenece a la disciplina del Madrid desde el invierno pasado, por más que acabara el curso anterior en el Mallorca, donde se formó desde los 10 años. Y dos partidos en Primera División han bastado para darle la razón a Perarnau; Asensio cuajó un buen encuentro ante la Real Sociedad y desbordó como quiso frente al Valencia. Su eclosión, en cualquier caso, era vaticinada por todos.
Cuando José Luis Oltra llegó al banquillo del Mallorca, en 2013, ya le advirtieron desde la entidad. “El primer día me hablaron de él porque estaba en el filial (Tercera División) siendo juvenil de primer año”, recuerda Oltra, ahora técnico del Córdoba; “y fui a verles un partido de pretemporada y al minuto uno ya vi que era diferente, que tenía una talento especial. Por lo que le llamé a entrenar con nosotros”. Y prosigue: “Entonces me quedó claro: ese chaval tenía cambio de ritmo, desparpajo, buen golpeo y desborde”. Tanto asombró que los más veteranos del equipo, a las pocas sesiones, se acercaron al mister. “No veas cómo juega el niño”, le dijeron Martí, Nunes y Aouate, entre otros. Eso mismo pensaron en la dirección deportiva del Barcelona, que negociaron durante varios meses por el futbolista. “Sobrio, inteligente y muy completo. No sobreactúa y casi siempre hace lo que necesita el juego porque toma las decisiones correctas. Gran claridad y golpeo de balón a pelota parada”, explicaba uno de los muchos informes que se apilaron en las carpetas de los ordenadores del club azulgrana, que lo perseguía desde juveniles. Incluso pareció que cerraban el fichaje por tres millones. “Pero pidieron más y la directiva decidió que no había dinero”, cuentan desde el club. Por lo que el agente del jugador llamó al Madrid, que no dudó en pagar 3,7 millones.
“Sobrio e inteligente. Casi siempre hace lo que necesita el juego porque toma las decisiones correctas”, explicaba uno de los informes del Barça sobre Asensio
Antes, en el Mallorca, Asensio fue jugando a cuentagotas con Oltra. “Ahora me arrepiento”, explica el entrenador; “porque quería protegerlo y darle minutos espaciados porque el equipo no estaba bien y pensaba que lo podía quemar antes de tiempo. Pero me doy cuenta de que quizá me hubiera sacado de más de un apuro”. No sucedió así y llegó Lluís Carreras al banco bermellón. “Es talento puro. No rehúye ninguna situación del juego, sino que toma la responsabilidad a cada momento del partido”, le define el entrenador desde Shanghái y a través de un mensaje de móvil. Y, en la siguiente temporada (2014-15), le dirigió Valery Karpin. “Lo podría comparar con Gustavo López. Muy rápido y con una zurda que le permite hacer muchas cosas, pero Marco es más potente”.
Otro aspecto que todos destacan de Asensio es su madurez y sobriedad. “Es un chico muy formal y muy serio. Aunque dentro del vestuario se suelta un poco más”, revelan desde el Espanyol, contentos por la gran relación que mantiene con Gerard Moreno, con quien coincidiera en el Mallorca y su actual compañero de habitación en los desplazamientos del equipo. “Es callado y un poco tímido, quizá por la complicada situación que le tocó vivir hace unos años [el fallecimiento de su madre]. Pero asume las situaciones con normalidad”. Se añade Carreras: “Tiene unos valores de respeto y familiares enormes”.
“Estamos encantados con la llegada de Asensio”, retoman desde el Espanyol. Sobre todo porque el martes descompuso al Valencia tanto a balón parado como actuando de trampolín en las contras. Es la llegada anunciada.
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