O Pogba o Gundogan para ocupar la plaza de Xavi

Hace unas semanas, la comisión del área deportiva del Barça se reunió con Luis Enrique para definir los puestos a reforzar para el próximo ejercicio. Conforme con la plantilla del triplete, el técnico —aún no ha confirmado su continuidad—respondió que le alcanzaba con rellenar los vacíos. El primero en llegar ha sido Aleix Vidal, presentado ayer y por el que han pagado al Sevilla 18 millones más cuatro en variables; el siguiente: Pogba o Gundogan.

Sin un director deportivo, después de las intentonas fallidas sobre Bakero, Óscar y Laudrup, el Barcelona creó una comisión deportiva de cinco integrantes: el director de las relaciones institucionales Albert Soler actúa de coordinador; Ariedo Braida es el encargado del mercado internacional; Charly Rexach interactúa como asesor y “pone el sentido común porque conoce la casa como nadie”, cuentan desde las oficinas azulgrana; además del vicepresidente deportivo Jordi Mestre y el directivo y responsable del fútbol sala Javier Bordas. Una comisión que ya sabe que de continuar el presidente Bartomeu deberá fichar a un director deportivo —“esto es transitorio”, aclaran desde el Barça— y que se reúne una vez al mes sin un sitio fijo puesto que se han visto en el palco del Camp Nou, en la ciudad deportiva, en el hotel Princesa Sofía...

El club italiano pide 100 millones por su estrella, sabedores de que le quieren el Madrid, el City y el PSG

El funcionamiento del área deportiva se resume en cuatro pasos: los técnicos piden posiciones, el área de scouting propone una lista acotada de nombres, el secretario técnico Pep Boada y el director de fútbol formativo Jordi Roura los evalúan, y la comisión limita la lista a dos o tres nombres que le pasan a Luis Enrique. Como en el caso de Aleix Vidal. “Al mister se le propuso como mejor opción el lateral del Sevilla —entraron en la terna Johnson (Moenchengladbach), Soares (Sporting de Lisboa) y sobre todo Van Rijhn (Ajax)— y respondió que era en el que había pensado”, explican. Así, Vidal cubrirá la baja de Montoya, que es al único que le dejarán marchar si llega una buena oferta, y seguramente de Alves, a quien le ofrecieron la renovación por dos años más uno, que dependía de si cumplía el 60% de los minutos totales. “La oferta económica era prácticamente igual a lo que cobra ahora, por lo que nos ha sorprendido que no quisiera renovar”, desvelan desde el Barça. De hecho, sólo le quedarían unas horas para prolongar el contrato porque la junta dimitirá esta tarde para fijar unas fechas para las elecciones.

Además de un lateral derecho, Luis Enrique pidió un extremo —ya no— porque el club pensaba que Pedro no renovaría y un centrocampista que ocupe la plaza de Xavi. “La prioridad es Pogba”, apuntan. Ocurre que el Juventus ha tasado al futbolista en 100 millones. “No tenemos prisa ni necesidad”, argumentan desde el club italiano, conscientes de que el City, Madrid y PSG están dispuestos a pagar generosamente. En caso de que no salga la operación Pogba, el Barça ficharía a Gundogan, a quien le hicieron hace un mes la revisión médica en Alemania, preocupados como andaban por el estado de su espalda. “No se detectó ningún problema”, esgrimen desde la entidad.

Tello, por su parte, no regresará del Oporto y Munir estará en el primer equipo porque así lo indica su contrato, por más que el Ajax insista en el préstamo. Además, cederán a Adama, a quien se le debe aumentar la ficha, y a Halilovic, que debería jugar en el primer equipo por contrato.