Pablo Laso: “Parece que es más alivio que alegría. Disfrutemos”

A este Madrid que ha rozado la excelencia en muchos momentos de años anteriores le faltaba este título para cerrar el círculo. En la cabeza de los jugadores y de Pablo Laso solo estaba ganar la Euroliga después de perder dos finales y tras la conquista el técnico estaba “muy, muy feliz”, ya se encargó de repetirlo varias veces, pero también se apreciaba que se había quitado un notable peso de encima. “A veces en este club ganar es más un alivio que una alegría. Disfrutemos”, comentó en sala de prensa. En esa línea se expresó también Sergio Rodríguez: “Es un sueño hecho realidad, nos hemos quitado un gran peso”.

Entre los jugadores del Real Madrid flotaba la sensación de que con la victoria se había hecho justicia. “El baloncesto nos debía algo así”, aseguró Rudy Fernández. “Es algo increíble, creo que hemos luchado muchísimos años por conseguir esto”, continuó el alero balear. Otro de los aspectos que destacó Rudy fue el de la presión que supuso jugar en casa y reconoció que perder esta tercera final hubiera sido "un palo muy gordo". Sergio Llull corrió por la zona mixta abrazado al trofeo de campeón. “En el Madrid los objetivos son llegar a las finales y ganarlas, no hay otra cosa, es la responsabilidad que exige esta camiseta”.

La final fue más dura de lo que indica el marcador final, un partido feote y decidido desde la brega y el trabajo colectivo. Ahí es donde destacó Nocioni, el MVP de la Final Four. “No ha sido bonito, pero hemos jugado duro y cerrado el rebote, así se debe jugar una final”, subrayó el Chapu tras el encuentro. Pablo Laso parecía más feliz aún que el Chapu por el MVP. El técnico ya había ensalzado al argentino tras la final y ayer lo volvió a hacer: “El mayor talento del Chapu es su corazón. Ha sido muy importante durante toda la temporada. Me alegro mucho por él”.

Otro de los jugadores clave en el partido fue Jaycee Carroll. El escolta estadounidense no pudo aportar mucho en la final del año pasado por problemas físicos y en esta se sacó la espina. Sus 11 puntos del tercer cuarto fueron determinantes para que el arreón de Olympiacos en el tercer cuarto se quedara en nada. Como dijo el propio técnico griego, Iannis Sfaropoulos, “fueron el punto de inflexión” del partido. Laso también quiso destacar el esfuerzo defensivo del americano: “Su trabajo en defensa sobre Spanoulis fue muy importante”.

Sin embargo, el técnico madridista quiso repartir el mérito de la defensa del líder de los griegos entre todo el equipo. “No tengo la fórmula mágica para pararlo. Hemos variado la defensa entre varios jugadores para que no se acostumbrase a un solo defensor. Hemos hecho un gran trabajo”, destacó.

El recuerdo de las dos finales perdidas también estuvo en las palabras de Laso. “Fueron duras esas derrotas, pero ahora miras atrás y te enorgulleces. También te acuerdas de las personas que ya no están en el equipo. Esto es suyo también”. A pesar del éxito, el vitoriano no olvida los momentos de esta temporada, cuando el arranque dejó algunas derrotas y un juego menos vistoso que el año anterior. “Nos hemos mantenido unidos, eso significa mucho”.

El entrenador quiso dejar claro que el equipo no tiene la intención de cambiar. “Antes del partido recibí un mensaje que me pedía que siguiésemos siendo como somos, y esa es mi intención”. A pesar de ello, Laso no cree que su obra en el Madrid esté completa. “Sé de la exigencia de este club. El otro día mi hijo me reconoció que no esperaba estar tanto tiempo en Madrid”, contó entre risas. En una cosa sí se mostró 100% satisfecho: “Mi intención era hacer un equipo reconocible y reconocido, creo que lo he conseguido”.