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NBA | HISTORIAS DE UN TÍO ALTO
Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Los Bulls y el cuento de Rose

Rose lanza, ante la mirada de Pachulia y Gasol.
Rose lanza, ante la mirada de Pachulia y Gasol.TANNEN MAURY (EFE)

Parece que este año, especialmente tras la 76.000 recuperación de Derrick Rose, los Bulls tienen una posibilidad remota de ganar el campeonato. Estaría bien si fuese verdad (y no lo es, entre otras cosas, porque aunque pueda parecerlo, Derrick Rose no ha tenido 76.000 lesiones). Volverán a fracasar porque, tanto el equipo como los aficionados y los periodistas que siguen la actualidad de la plantilla, prefieren la versión simple del cuento (Derrick Rose) a la más compleja, protagonizada por Pau Gasol.

En ataque, Gasol controla el flujo del juego con precisión quirúrgica en sus pases y una insólita comprensión de los fundamentos del baloncesto

Los números de Pau durante la temporada regular son elocuentes: 18,5 puntos, 11,8 rebotes (máximo guarismo en su carrera), 50% de acierto en tiros de dos y un 80% en tiros libres. Según boxscoregeeks.com, ha sido determinante en 13 o 14 victorias de su equipo (de un total de 50). Su autoridad no sólo es indiscutible en el terreno estadístico, sino que supera también la frontera de lo subjetivo. En ataque, Gasol controla el flujo del juego con precisión quirúrgica en sus pases y una insólita comprensión de los fundamentos del baloncesto. En defensa, gobierna en el interior de la pintura con un instinto extraordinario y un sorprendentemente hábil juego de pies.

Su estado de forma no ha pasado desapercibido. Ha sido titular en el All-Star y su temporada ha servido para afianzarle en la élite de la Liga (garantizándole, aún más, un lugar en el Salón de la Fama). Pese a todo, cuando hablamos de los Bulls, los focos vuelven siempre a Derrick Rose, un jugador que tira demasiado de tres, que en defensa tiene la efectividad de una llave fija y cuya aportación más destacable en la temporada regular ha sido su papel protagonista en cinco derrotas del equipo.

Los focos vuelven siempre a  Derrick Rose, un jugador que tira demasiado de tres, que en defensa tiene la efectividad de una llave fija y protagonista en cinco derrotas del equipo en la fase regular

Supongo que detrás de esa fascinación está el márketing. Rose fue considerado el MVP (Jugador Más Valioso) en 2011 y eso quiere decir que los mismos que ahora valoran su juego ya emitieron un veredicto. Luego está el componente dramático de las lesiones: a la gente le gustan las historias de superación. Pero sobre todo, lo que pasa tiene que ver con la incapacidad para entender el refinado estilo de Gasol (en parte por su condición de extranjero). Su manera de dominar (movimientos elegantes en el poste, visión de juego) no casan con la percepción americana (ser dominante es fundamentalmente machacar: canastas, rivales y, a veces, pequeños países).

Y como no es fácil entender a Pau, los americanos ni siquiera se molestan en intentarlo. Una pena, porque si abrazasen la complejidad de Gasol no sólo sería más interesante que abandonarse en la simplicidad de Rose, sino que además aumentaría las oportunidades de los Bulls. Al fin y al cabo, los equipos son como las personas: les va mejor cuando aceptan su esencia. Identificarse con el base convierte a los Bulls en un desorientado hombre de mediana edad que se compra un Corvette y se acuesta con su secretaria.

Y todo el mundo sabe como acaban esas historias: divorcio, abatimiento, un apartamento mal amueblado… y una eliminación prematura de los ‘playoffs’.

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