Hiddink: “Los que pitaron a Iniesta son unos sinvergüenzas”

Guus Hiddink dio una lección de deportividad a propios y extraños ayer por la noche, semejante a la que hace más de 10 años ofreció como entrenador del Valencia. Entonces hizo retirar una bandera nazi de la grada de Mestalla en 1992, actitud que le reportó numerosos reconocimientos, entre ellos el premio de la Fundación Ernest Lluch, creada en homenaje del que fuera miembro del PSC y ministro de sanidad, asesinado por ETA. Ayer, tras la victoria de la selección holandesa ante España (2-0), fue muy duro con los seguidores de la oranje que llenaron las gradas del Ámsterdam Arena, a los que llamó “sinvergüenzas” por abuchear a Iniesta cuando el volante español entró en el campo, mediada la segunda parte, y cada vez que el manchego tocó el balón.

“Al principio no me di cuenta, pero pregunté y me dijeron que los abucheos eran por Iniesta. Pregunté el por qué y me dijeron que por el gol de Sudáfrica. No lo entiendo, es una verdadera vergüenza”, aseguró. Verdaderamente indignado, el veterano técnico, de 68 años, añadió: “Los que han pitado a Iniesta son unos sinvergüenzas, deben sentirse mal por faltar el respeto a una persona tan grande, a un grandísimo jugador y un gran deportista que merece todo el respeto”. Le respondió un periodista holandés que tal vez debía comprender la animadversión de los aficionados hacia el jugador del Barcelona: “Al fin y al cabo, un gol suyo nos arrebató el título de campeones del mundo”, dijo el reportero. “Sí, pero así es el deporte. Iniesta marcó en la final del Mundial, pero merece respeto. Si hay alguno que piensa que le robó el Mundial a Holanda es un mezquino. España nos ganó con un gol de Iniesta, que cumplió con su obligación, como hicieron Van Persie y Robben en Brasil. No estoy conforme con estos pitos, ni los entiendo ni los apruebo", añadió el seleccionador holandés que ocupó los banquillos del Valencia, Real Madrid y Betis en los años 90 y que ha disputado tres Mundiales con tres selecciones: la holandesa en Francia 1998, con Corea en la cita de Corea y Japón 2002 y al frente de Australia en el campeonato de Alemania 2006.

Vicente del Bosque trató de quitarle hierro al incidente, siempre cortés, y dijo que tiene a la afición holandesa por muy respetuosa y que pensaba que había actuado “sin maldad, con ironía” al pitar a Iniesta.

El 9 de febrero de 1992, cuando Hiddink era entrenador del Valencia, el técnico holandés ya tuvo otro gesto que le valió el reconocimiento del mundo futbolístico. Ese día, se enfrentaban en Mestalla el Valencia y el Albacete y Hiddink ordenó a un empleado del club valenciano que retirase de las gradas una bandera nazi, por considerar que incitaba a la violencia y bajo la amenaza de no iniciar el encuentro.