Cuatro Honda para Márquez

Como ganó la última carrera de la temporada, triunfo innecesario pero muy revitalizador, se ganó un día libre con el que no contaba. Descansó el día después de la fiesta de clausura del curso y el martes volvió a la pista en Cheste para comprobar que la moto que Honda le había preparado para defender el título no le terminaba de convencer. Era el mes de noviembre y Marc Márquez había ganado el mundial después de encadenar diez victorias consecutivas con una máquina salvaje que le obligaba –tal y como él había pedido– a derrapar a la entrada de las curvas. No necesitaba, sin embargo, una moto más agresiva. No había pedido más potencia. Aún así, la Honda que probó en aquellos entrenos se caracterizaba por una entrega de potencia demasiado brusca. Y el campeón se marchó para casa con la petición de que la fábrica alada lograda presentar en los primeros tests de pretemporada una máquina más dócil.

Hoy, el día D, primera jornada de los entrenamientos de pretemporada en el circuito de Sepang, en Malasia, Márquez ha podido probar hasta cuatro motos –Honda ha llevado a Sepang una decena, además de a su piloto de pruebas, Takahashi–, aunque finalmente sólo se subió a tres de ellas, versiones totalmente diferentes: una era como aquella con la que logró su segundo título de MotoGP, otra era el prototipo ideado para este 2015, y la tercera una combinación de ambas. Esa ha sido la que más le ha gustado y aquella con la que, seguramente, trabajará estos días (los tests se alargan hasta el viernes) para adecuarla a su estilo de pilotaje. El chico de Cervera, que ha terminado el día con el tiempo más rápido, ha logrado ponerse en cabeza sólo al final de la sesión, en su última vuelta, después de pasar toda la mañana probando las motos para poder sacar conclusiones y a no menos de seis décimas de sus rivales en el equipo Yamaha.

Es una historia totalmente diferente a la del año pasado. Yamaha ha trabajado en pequeñas cosas para mejorar la moto y se nota” Jorge Lorenzo, piloto de Yamaha

“Ha sido un día duro y a la vez muy positivo, porque la primera vez después de las vacaciones tienes que volver a encontrar la confianza en la moto y adaptarte de nuevo a las sensaciones de una MotoGP. Me he dedicado a probar bien las tres motos y decidir cuál era la ideal para continuar el test; por la tarde nos hemos centrado más en una de ellas. He empezado a rodar mejor y a encontrarme más cómodo encima de la moto. Todavía quedan muchas cosas por probar, así que tendremos que mantener la calma como hemos hecho y seguir trabajando”, señalaba el piloto en el comunicado del equipo. Su compañero, Dani Pedrosa, también dispuso de otras tres motos para probar. Y aunque se acercó algo más a las Yamaha durante el día, terminó la sesión con el quinto mejor tiempo, a cuatro décimas de su compañero.

El día tuvo otro color para Jorge Lorenzo y Valentino Rossi, que ya tienen claro que la base sobre la que trabajarán el resto de la pretemporada es esta con la que lo han hecho durante este miércoles. La M1 que han puesto en pista se parece mucho a aquella con la que terminaron el año pasado, aunque ha mejorado mucho el agarre –uno de los problemas fundamentales que llevó de cabeza a Lorenzo al principio del curso anterior– y apenas falta mejorar el agarre en la salida de las curvas; además, lucen una versión mejorada del escape recortado que presentaron en noviembre en Valencia, que permite que la moto sea más suave en las curvas y también ayuda a una entrega de potencia más dulce.

“Es una gran sensación empezar la pretemporada sin demasiados problemas, así de cómodo con la moto y tan bien físicamente. Es una historia totalmente diferente de la del año pasado. Estoy muy contento. Yamaha ha trabajado en pequeñas cosas para mejorar la moto y se nota en que hay tres M1 entre las cinco mejores motos, sobre todo si se tiene en cuenta que este no es nuestro circuito favorito, ni se adapta a mi estilo”, declaraba Lorenzo, con el tercer mejor tiempo, dos décimas por detrás de Márquez. Rossi acabó el segundo, aunque estuvo primero durante un buen rato, y se mostró igualmente satisfecho. “Estamos intentando mejorar el ritmo, sobre todo con las gomas gastadas, para ser más rápido en las segundas partes de las carreras”, concedió. Y combatió el calor con un casco nuevo idéntico a un gorro de lana para la nieve.