Spanoulis doblega al Valencia
La solvencia de la estrella del Olympiacos decide el apasionante e igualado duelo en la Fonteta (68-71)
Spanoulis arrambló con el Valencia, que se las vio y se las deseó para frenar al metrónomo del Olympiacos. Lo lleva siendo durante varias temporadas del baloncesto europeo y lo fue también en el apasionante duelo que se vivió en la Fonteta en el regreso del club valenciano, tres años después, a la máxima competición europea. El base-escolta-alero griego marca los tiempos del juego, decide cómo ataca su equipo, si anota él o si lo hace alguno de sus compañeros.
Cerró con 21 puntos, dos rebotes, cinco asistencias, c uatro pérdidas de balón y recibió 10 faltas, tantas como el resto de sus compañeros juntos. Fue también quien se encargó de cometer falta sobre Van Rossom en la última opción que tuvo el Valencia, cuando perdía por 68-71 y se lanzaba desesperadamente en busca del triple para forzar la prórroga. Spanoulis lo impidió.
Para llegar a dominar de tal forma la escena resulta imprescindible poseer una mente privilegiada, un cerebro que compute al instantes todos y cada uno de los movimientos y espacios que se despliegan en la cancha. Y a ello, se debe añadir puntería, agilidad y fortaleza física. Lo tiene todo Spanoulis, incluida la solvencia para deshacerse de los sucesivos marcadores y las trampas defensivas que trató de aplicarle Velimir Perasovic. Incluso posee también un punto desafiante que provoca faltas y chispas en sus rivales, como sucedió en un par de rifirrafes con Buycks y Pau Ribas.
VALENCIA, 68; OLYMPIACOS, 71
Valencia: Van Rossom (10), Rafa Martínez (0), Sato (11), Harangody (14), Lishcuk (3) –equipo inicial-; Ribas (2), Lucic (6), Vives (0), Buycks (11), Loncar (8) y Aguilar (3).
Olympiacos: Spanoulis (21), Mantzaris (9), Lojeski (14), Petway (0), Hunter (9) –equipo inicial-; Dunston (0), Sloukas (14), Agravanis (0) y Falayette (4).
Parciales: 18-20, 18-18, 18-18 y 14-15.
Árbitros: Ryzhyk (Ucrania), Belosevic (Serbia) y Kowalski (Polonia). Señalaron faltas técnicas a Ribas y Spanoulis.
Fuente de San Luis de Valencia. 8.500 espectadores. Primera jornada de la Euroliga.
El Valencia tuvo que afinar en el tiro y presionar a base de bien para mantenerse en el partido. Sus pívots, en especial Kresimir Loncar, no estuvieron finos ni en el tiro, Harangody aparte, ni en el rebote. Y su ataque se atascó ante la defensa 2-3 en zona del Olympiacos. Van Rossom, Sato y Lucic se encargaron de mantener en jaque al equipo griego. La igualdad fue la tónica dominante hasta mediado el tercer cuarto. Los robos de balón y los triples del Olympiacos fueron abriendo pequeñas brechas en el marcador.
Pero el Valencia se aferró a su suerte, gracias sobre todo a Dwight Buycks, el escolta estadounidense incorporado este año al equipo, que arriesgó en ataque y anotó los puntos que ayudaron a su equipo a pasar del 51-56 al 62-58 para encarar la recta final del encuentro con todas las opciones abiertas. Un parcial de 0-8 volvió a dar ventaja al Olympiacos, que reguló con la maestría de Spanoulis y la buena mano de Lojeski. El Valencia se mantuvo en la pelea hasta el final, pero algunos pequeños detalles como su incapacidad para cerrar un par de últimos rebotes en defensa, le cortaron las alas.
El Unicaja, con la notable actuación de Toolson, Will Thomas, Fran Vázquez y Kuzminskas, se estrenó con buen pie. Venció por 63-78 en la cancha del Cedevita Zagreb, que solo cuenta con un extranjero. El Real Madrid y el Barcelona entran hoy en acción, ante el Zalgiris Kaunas (19.30, Canal + Deportes) y el Bayern de Múnich (21.30, Canal + Deportes).
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