Suzuki vuelve con Viñales y Espargaró

Hace muchos meses que Randy de Puniet, expiloto de MotoGP, anda haciendo pruebas con una Suzuki por los circuitos del mundo. El regreso de la fábrica japonesa, que dejó el Mundial en 2012 por problemas económicos, estaba cantado. Pero también lo ha estado desde hace tiempo quienes serían los dos pilotos que completarían la estructura del equipo: los españoles Aleix Espargaró y Maverick Viñales. Por eso, el anuncio hecho hoy por Suzuki en Intermot, la feria internacional de la moto celebrada en Colonia, no ha pillado a nadie por sorpresa.

La casa nipona ha anunciado también su vuelta a la alta competición a partir de 2015 en un comunicado en el habla de su nueva moto, la GSX-RR (con un “nuevo y desarrollado motor de cuatro cilindros”, dicen), con la que participará como invitada en el último gran premio de la temporada, en Valencia el 9 de noviembre. En la nota explica que aunque dejó el campeonato de MotoGP, Suzuki ha estado trabajando desde entonces para volver.

Hace meses que la fábrica, a través del director deportivo del equipo, Davide Brivio, cerró sendos acuerdos con dos pilotos españoles: Aleix Espargaró, que subió al podio por vez primera el pasado fin de semana gracias a una acertada estrategia que le subió al segundo escalón del podio; y Maverick Viñales, que logró su segunda victoria de la temporada, también en Alcañiz, con una carrera redonda en la que se aseguró matemáticamente el título de novato del año.

El primero, con más experiencia y que ha ofrecido un genial rendimiento los últimos tres años con las motos de categoría open de MotoGP, cargará con el peso del desarrollo de la máquina. El joven Viñales, de 19 años y al que le bastaron un par de carreras en Moto2 para decidir su futuro, tendrá así su oportunidad de debutar en la categoría reina con una moto oficial y sin más responsabilidad que intentar hacerlo cada día mejor.