“Si suma Leo, sumamos mucho más”

A Luis Enrique le pusieron deberes al llegar al banquillo del Barcelona: recuperar la mejor versión de Leo Messi. Como si eso fuera fácil o como si el delantero argentino hubiera dejado algún día de ser lo que fue. Hace años que Leo se mira a sí mismo y compite contra sus propios récords, así que parece condenado por los 91 goles que marcó en todo 2012 o los números que firmó en el curso liguero 2011-12, cuando alcanzó 50 goles y regaló otros 16.

Resulta una evidencia que hasta el mejor jugador del mundo necesita a su alrededor orden y organización, durante la semana y en los partidos, para que su talento no se pierda. Marcó 28 goles y dio 11 asistencias en 31 partidos el curso pasado, pero supo a tan poco que no supo a nada. “Messi es único, especial, y sus compañeros perciben que cuando tiene el balón puede asistir de manera magnífica. Me encanta que se aprovechen de la calidad de Leo”, señaló ayer Luis Enrique; “ha sido un partido completo que sirve de refuerzo en lo particular y en lo general”. Recogió el testigo el director deportivo azulgrana, Andoni Zubizarreta: “Leo es un animal competitivo y es normal que a veces no siempre esté perfecto. Pero creo que Messi está a gusto, se siente cómodo en el equipo, en su dinámica… Creo que el Mundial, sin ser el resultado final que quería Argentina, le dio cosas”. Al tiempo, abundó: “Estamos para sumar entre todos, pero cuando suma Leo, sumamos mucho más. Es un jugador que en los peores momentos, cuando físicamente más le ha costado o anímicamente ha podido haber más nubes en su entorno, siempre nos ha ayudado”.

Messi, con Luis Enrique, juega más como un interior, es más ‘10’ que nunca

Así que le tocaba a Luis Enrique conseguir que Messi recordara a sí mismo y parece haberlo conseguido. Le ha bastado a Leo con algo tan simple como trabajar con intensidad de lunes a sábado, con jugar en un equipo ordenado, para volver a ser La Pulga, que ha dado un paso atrás para jugar y hacer jugar. Si en su día, a la hora de la alternativa, Frank Rijkaard le encontró un hueco pegado a la banda derecha y desde ahí hizo diabluras, si con Guardiola se acercó al área como falso 9 y encontró la portería como nadie, ahora con Luis Enrique juega más como un interior, de volante, es más 10 que nunca.

La Pulga suma 100 asistencias en la Liga; en lo que va de curso ha firmado tres goles —de cuatro disparos a la portería rival— y ha dado seis asistencias, lo que supone una participación espectacular en la cuenta realizadora del equipo: en nueve de los 12 goles ha tenido algo que ver. Luis Enrique ha hecho los deberes.