Victoria de Hamilton
El británico, nuevo líder del Mundial, se impone en Montmeló a su compañero de Mercedes, con Ricciardo tercero Alonso, sexto
La superioridad de Mercedes en el Mundial de Fórmula 1 volvió a evidenciarse en el Gran Premio de España. Después de ver la clasificación del sábado, las dudas que existían eran solo sobre cuál de sus dos pilotos sería el ganador. Hamilton partía desde la primera posición en la parrilla de salida y eso le concedía una cierta ventaja. Y el británico luchó hasta el final para aprovecharla, bajo la constante presión de su compañero Nico Rosberg. La batalla entre los dos pilotos de la escudería alemana concluyó con la cuarta victoria del año de Hamilton, tras una lucha a muerte en las últimas vueltas con Rosberg, que acabó segundo. El doblete, sin embargo estaba cantado desde el viernes: es el cuarto de esta temporada. Mercedes ha ganado todas las carreras y ha copado siempre la pole position.
La lucha de las demás escuderías se centra, pues, en la tercera posición. Y ahí, también parece bastante claro que Red Bull le está ganando la partida a los dos coches de Ferrari. E incluso que hay otras escuderías que pueden interponerse entre ellos. A pesar de que Vettel partió desde la 15ª posición –por una sanción de cinco puestos por cambiar la caja de cambios-, la diferencia entre los monoplazas de las bebidas energéticas y los bólidos rojos se sitúa en estos momentos en casi un segundo. Por tanto, todo el mundo tenía claro que la tercera posición iba a ser para Daniel Ricciardo –aunque perdió una posición en la salida- y que Vettel tenía armas suficientes para poder remontar hasta situarse a la estela de su compañero. Y eso fue lo que ocurrió.
Se vio una de las imágenes más impresionantes de este Mundial: los dos Mercedes doblando como una exhalación a los dos Ferrari
Ni el Ferrari de Fernando Alonso ni el de Kimi Raikkonen estaban en condiciones de poder defender sus posiciones cuando recibieron el ataque final de un Vettel que ascendía lanzado, con neumáticos mejor conservados ya en las postrimerías de la carrera. En realidad, las últimas diez vueltas fueron las más interesantes. No había ocurrido nada remarcable hasta entonces. Pero allí empezó a palparse que nada estaba todavía decidido. Y la batalla más importante que se vislumbraba era la que dirimían los dos hombres de Mercedes. Hamilton sufría más de la cuenta con sus neumáticos duros para frenar a un Rosberg que le atacaba y se mostraba más rápido incluso que él con los blandos. Pero la experiencia del británico le permitió mantenerse en cabeza y colocarse por primera vez en cabeza del Mundial.
Por detrás, Ricciardo tenía una cómoda tercera posición y el podio asegurado. En cambio, Valteri Bottas (Williams) comenzaba a notar el aliento de sus perseguidores y acusaba la tensión. Los Ferrari de Raikkonen y de Alonso iban por detrás, acosados por un Vettel que parecía imparable. Les pasó a los dos sin excesivos problemas y se fue disparado hacia Bottas al que alcanzó y superó a tres vueltas para el final. Entonces, se vio una de las imágenes más impresionantes de este Mundial: los dos Mercedes doblando como una exhalación a los dos Ferrari.
Y en el último tramo de la carrera se dirimió la batalla final entre los dos pilotos de Ferrari. Alonso persiguiendo, alcanzando y pasando a un Raikkonen que se resistía a que su compañero acabara de nuevo por delante de él. Alonso acabó sexto. Raikkonen, séptimo. Pero el mensaje que ofrecieron los dos Ferrari es que están aún muy lejos de Mercedes, de Red Bull y que otras escuderías les han alcanzado.
“Estoy muy contento. La carrera ha sido divertida, con algunas batallas importantes, aunque yo luchaba por posiciones demasiado atrasadas”, señaló Alonso. “Los Mercedes nos han sacado 87 segundos. Su ventaja en puntos y en prestaciones es muy importante. Pueden ganar casi todas las carreras. Tienen el título en la mano, pero nosotros vamos a seguir intentando invertir las cosas. Hicimos el podio en China, pero aquí hemos vuelto un poco a la realidad. Esperemos que en Mónaco podamos avanzar un poquito”.
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