El viejo aroma de las bandas

En el traslado de escenario hacia esa especie de Old Trafford del siglo XXI que desprende el nuevo San Mamés, el viejo aroma del juego por banda que emitía La Catedral no se ha perdido. Ese fútbol romántico y con un punto hedonista de los extremos que se manchaban las botas de cal, propagado por los Gorostiza, Piru Gaínza, Argote, Rojo y hasta el propio Ernesto Valverde también ha dado el salto a la nueva sede del Athletic. Sigue rugiendo la hinchada cada vez que uno de sus jugadores de banda le cose una rosca templada a un desborde. Lo sabe bien el Atlético, que lo sufrió durante 25 minutos en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa (1-2). Un acoso desde los flancos que se tradujo en un insuficiente gol de Aduriz, pero que puso a prueba a Courtois. El paradigma de ese juego de centro y remate fue el duelo que midió al Athletic con el Valladolid en la primera vuelta (4-2), en el que ejecutó 54 centros al área. Un bombardeo que radiografía la culminación de ese ritmo alto de juego que trata de imprimir Valverde.

La transformación de Juanfran y Filipe les ha convertido en una de las parejas más completas

Defiende el liderato el Atlético contra el equipo que más balones pone en el área contraria de todo el campeonato (887), principalmente desde los costados. La prueba es dura para Juanfran y Filipe Luis, dos laterales de corte ofensivo que, sin embargo, forman parte de la defensa menos goleada del campeonato. Ambos han sufrido una transformación en su juego que les ha convertido en una de las parejas más completas de la Liga en ataque y en defensa. A Juanfran, Mono Burgos le ha enseñado unos cuantos secretos desde su visión de exportero. Cómo perfilarse, cuándo cerrar, cuándo entrar o cuándo aguantar en el uno contra uno. También Simeone, Vizcaíno y Godín le han aconsejado para convertirlo en mejor defensa. “Nosotros valoramos en él su mejoría en cuanto a los perfiles defensivos y en la orientación en jugadas que le pillan más alejadas de su posición, como las diagonales a la espalda. Puede que haya perdido protagonismo en ataque, pero ahora es mejor jugador”, analizan desde el cuerpo técnico de la selección española, que le tiene muy en mente para el Mundial. Esta noche no parece que vaya a ser así porque la banda más productiva del Athletic es la derecha, donde se desenvuelven Iraola y Susaeta, el futbolista de la Liga que más centros coloca en el área (214).

Luis Felipe contra Iraola y Susaeta

Será Filipe Luis el que se las verá con esa dupla. Su entorno señala a Joaquín Caparrós como el técnico que le mejoró defensivamente en el Deportivo. “Me habló de él su amigo Arbeloa, con el que coincidió en el Castilla. Se había vuelto a Brasil y hablé con Lendoiro para que lo fichara. Era un lateral muy a la brasileña, de mucha mentalidad ofensiva, pero con una resistencia tremenda para la ida y la vuelta. Solo había que pulirle los conceptos defensivos, colocación, perfiles…”, admite Caparrós. “Es uno de los mejores laterales del mundo, no entiendo cómo Scolari no le lleva”.

Si el Athletic se construye desde ese juego por los costados, también el Atlético tiene querencia por desplegarse por fuera. Juanfran (115) es el tercer lateral de la Liga en pases al área por detrás de Rukavina y Edu Albácar, y Filipe Luis (93), el séptimo, justo por detrás de Iraola (101).

El partido de hoy se prevé intenso, de mucha fuerza en las segundas jugadas y con mucho en juego. Para el Atlético, seguir en lo más alto. Para el Athletic, consolidar la cuarta plaza que le permitiría al nuevo San Mamés airear ese viejo aroma de las bandas en la Liga de Campeones.